ROSA MEXICANO

14 abril 2022
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Los moreno se pasaron

Como tres pueblos en

Conteo de votos de la

Revocación de mandato

 

No fueron 300 mil sino 235 mil

que como quiera son muchos

También en mi Pueblo Mágico

Hay estafadores: Felipe Cantú

Cuidado no caigan en sus manos

Cuidado, en Walmart hay ladrones

YO? Yo voy con mi hacha

Sean las primeras líneas de esta columna,  para informar a las personas que tratan de localizar hospedaje en mi Pueblo Mágico, o sea Cuatro Ciénegas, para recomendarles que pelen el ojo y no se dejen engañar por un estafador de nombre FELIPE CANTU, que a través de una página en internet de nombre Catelaya, para estas vacaciones ofreció servicios de habitaciones en hotel, fincas campestres o casas particulares en renta.

Por supuesto para contratar el servicio requerido había que contratarlo y depositar el 50% del costo del alquiler.

No se cuantas personas cayeron en la estafa de FELIPE CANTÚ y que llegando al pueblo mágico, se dirigieron al sitio donde habían solicitado hospedaje para encontrar que FELIPE CANTU los había estafado  y que la página de internet ya no existía.

En este caso se encuentran familias del resto del estado a partir de Monclova.

No resta sino recomendar a las personas que sin chequear antecedentes de la persona que ofrece ese tipo de servicios, “cae” a que tengan mucho cuidado porque en todos los sitios de Coahuila para vacacionar, se está dando situaciones como las aquí narradas.

FELIPE CANTU es harto conocido por sus pésimos antecedentes como lo escribió ayer una dama de nombre Fernanda Pinto.

Uno de los muchos afectados que se decidió a denunciar en las redes a FELIPE CANTU, es mi hermano Manuel…

Como dudar de su palabra y sobre todo ya conociendo ahora   que se trata de un consumado pájaro de cuenta, un estafador sin medida.

Entonces a cuidarnos mucho porque también en Cuatro Ciénegas hay estafadores.

A mi tampoco me fue nada bien ayer.

Resulta que fui a Walmart Paseo de la Reforma y sucede que un leve descuido mío para bajar de la parte alta del anaquel un frasco de tomates deshidratado, un sujeto metió la mano a mi bolsa, cerrada por un broche al centro y sacó mi cartera con dos tarjetas de crédito, estampas de mis Santos, un tarjetero con mi credencial de elector, del Inapam, licencia, tarjeta de circulación y 100 y piquito de pesos.

Sol mi hijo ya había pagado las compras y traía consigo la tarjeta principal.

Aquello fue tan rápido que el ladrón no alcanzó a usarlas porque se cancelaron de inmediato y tendré que iniciar los trámites para obtener nuevas tarjetas y las credenciales porque hoy y mañana no hay  servicios bancarios.

Ni siquiera le voy a pedir a Papá Dios que le vaya mal a quien cometió ese robo.

Ya le he pedido que le vaya como se merece.

PS

Regreso el Martes, si Papá Dios lo permite

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