*LA CIUDAD Y EL CIUDADANO.* POR: G.A.R.

2 abril 2019
Visto: 838 veces

 

SALTILLO Y LA MIGRACIÓN QUE YA NO SE DETENDRÁ.

COCA COLA MÉXICO LE ENTRA A LOS PROGRAMAS DE AMLO.

NUEVA YORK COBRARÁ A LOS AUTOS QUE CIRCULEN EN MANHATTAN.

LES CIERRAN LAS PUERTAS DEL TRABAJO A LAS PERSONAS DOWN.

LA MEJOR CARTA DE LOS DEMÓCRATAS A LA CASA BLANCA, EN SERIOS PROBLEMAS.

LAS CIUDADES Y SUS ALCALDES CLAVES PARA LA SUSTENTABILIDAD MUNDIAL.

LA TERCERA TEMPORADA DE “LA CASA DE PAPEL”.

CRECE EL OPTIMISMO SARAPERO.

*LA CIUDAD.*

LA MIGRACIÓN, UN GRAN RETO PARA EL FUTURO.
La llegada constante de migrantes nacionales e internacionales es ya una tendencia en Saltillo. Lo mismo de los estados del centro y sur de la República, atraídos por su disponibilidad laboral,  que de Centroamérica,   Sudamérica, orientales, o de cualquier otro país.
Cada vez serán más.

La ciudad tendrá que seguir encontrando la mejor manera para integrar a quienes de manera individual o en grupos, decidirán quedarse aquí para iniciar una nueva etapa en sus vidas. La reticencia de muchas ciudades norteñas con respecto a las oleadas de centroamericanos crea tensiones y conflictos que los saltillenses no queremos vivir. Lo mejor será ser capaces de permitirles encontrar aquí su nueva casa. Los migrantes ponen a prueba nuestro verdadero compromiso con la inclusión, la solidaridad y la hospitalidad.

*EL PAÍS.*

COCA-COLA CAPACITARÁ A 1,050 BECARIOS DE JÓVENES CONSTRUYENDO EL FUTURO

Tras reconocer que “es difícil entender el futuro de México sin apoyo a los jóvenes en el presente”, Joan Prats, vicepresidente de Asuntos Corporativos de Coca-Cola México, dio la bienvenida a más de 1,050 jóvenes becarios que se inscribieron al programa de Jóvenes Construyendo el Futuro para fortalecer sus habilidades para insertarse de manera formal a un empleo.

A tres meses del arranque del programa, dijo: “Nos enorgullece y emociona ser parte de este programa y poder ser la primera oportunidad laboral de estos jóvenes. Nos comprometemos a integrarlos a un ambiente de trabajo que promueve el sentido de pertenencia e identidad, así como hacerlos parte de una comunidad que busca marcar una diferencia positiva en las próximas generaciones”.

Los jóvenes se van a capacitar en áreas de ventas, operaciones, trabajo industrial y administrativo en centros de trabajo distribuidos en 21 estados de la República, incluyendo las entidades con mayor población dentro de este sector, como Jalisco, Estado de México, Veracruz, Hidalgo, Ciudad de México y Puebla.

“Este programa es el orgullo y mayor reto de mi vida y hoy estamos demostrando que sí es posible y que era necesario atender a un sector poblacional históricamente ignorado”, dijo Luisa María Alcalde Luján, secretaria del Trabajo y Previsión Social.

La secretaria del Trabajo aseguró que cada vez son más las pequeñas, medianas y grandes empresas que abren sus puertas al talento de los jóvenes y Coca-Cola es un ejemplo para las organizaciones que aún no se inscriben al programa.

La meta inicial del proyecto liderado por la STPS es vincular a 2.3 millones de jóvenes entre 18 y 29 años que no estudian ni trabajan con diversos centros laborales. Los becarios recibirán, a cambio de desarrollar sus talentos y habilidades, 3,600 pesos al mes y seguro médico del IMSS. Se espera que en este año llegue a la meta de 1 millón de jóvenes, para lo cual la titular del ramo hace una intensa campaña.

*TRABAJO.*

LAS PERSONAS CON SÍNDROME DE DOWN CON LIMITADA INCLUSIÓN LABORAL.

Sólo 1 de cada 10 personas con discapacidad cognitiva o mental tiene empleo en México, estima el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred). El resto, depende económicamente de otras personas, lo que los pone en mayor riesgo de vivir en la pobreza.

Desafortunadamente, la exclusión laboral se debe mucho más a prejuicios que a escasez de talento, como en el caso de quienes tienen síndrome de Down, apunta la Organización Internacional del Trabajo (OIT).

En el marco del Día Mundial del Síndrome de Down, Rosalba Urquiza, directora general de la fundación Daunis, opina que la mayoría de las empresas no apuesta por la inclusión de personas con discapacidad intelectual – como las personas con Down – por desconocimiento y resistencia al cambio.

“Tienen el paradigma de que los jóvenes son personas enfermas y no tienen las competencias”, expresa.

El síndrome de Down es una condición, no una enfermedad. Se trata de una diferencia genética de 47 cromosomas, en lugar de los 46 que usualmente se forman. También se conoce como trisomía 21 debido a que ese cromosoma extra generalmente es una copia del 21.

Sin embargo, esto no es claro para todos. Por ejemplo, la Ley para la Atención Integral de las Personas con Síndrome de Down de la Ciudad de México señala a ese síndrome como un padecimiento médico, “y no una discapacidad producto de la sociedad”.

Esta definición fue impugnada por la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF), organismo que presentó el año pasado una acción de inconstitucionalidad ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) para que el marco legal sea modificado.

El largo camino por la inclusión
En Daunis, por su historia, saben que la inclusión laboral de personas con discapacidad no es fácil y requiere de mucho trabajo.

Esta fundación nació en Guadalajara en 1992, después de que Diego Merino Govea, un joven con síndrome de Down, cayera en depresión al ver que sus hermanos llevaban una vida normal (trabajo, pareja, fiestas, estudios) y él no.

Diego tenía claro lo que quería: trabajar, pero al no encontrar oportunidades, sus padres decidieron apostar por un taller de tamales en el que no sólo emplearon a su hijo, sino a más jóvenes con Down. Así nació Daunis.

Actualmente la fundación opera en la Ciudad de México. Desde 2011 ha logrado colocar a 90 jóvenes con discapacidad intelectual en el mercado laboral y capacita a alrededor de 40 jóvenes por año.

“Una vez que están listos para el mercado laboral, le pedimos a las empresas con las que tenemos convenio que abran vacantes reales. Es decir, que sean vacantes que sí necesitan cubrir y que no las creen sólo para emplear a los jóvenes”, explica Urquiza en entrevista con Factor Capital Humano.

Algunos lugares que emplean jóvenes con síndrome de Down son Café Café, en la Ciudad de México; Coffee Córdica 21, en Jalisco, y Cafetería Le Amour 21, en Nuevo León. A través de Daunis, algunos jóvenes han ingresado a trabajar a empresas como Coca Cola y Toks.

En 2017, en México nacieron 740 bebes con síndrome de Down. De ellos, 401 son niñas y 339, niños, de acuerdo con la Secretaría de Salud (SSA). A nivel mundial, la Organización para las Naciones Unidas (ONU) estima que la incidencia es de entre 1 de cada 1,000 y 1 de cada 1,100 recién nacidos.

Síndrome de Down y empleo
El reto no es sólo la inclusión laboral, sino que las personas con discapacidad intelectual tengan un trabajo en el que puedan desarrollar sus competencias y crecer. Además, que se trate de un empleo digno con acceso a seguridad social.

Daunis ofrece distintos servicios como capacitación en habilidades administrativas y computación, talleres productivos (tamales o repostería) y disciplina laboral en la que los jóvenes aprenden a relacionarse en el trabajo o cumplir con un horario.

Pero para que la inclusión laboral sea efectiva, es necesario preparar a toda la empresa para recibir a los jóvenes.

“Antes de que se contraten los chavos, les damos un taller de sensibilización a todos los empleados y al compañero guía, que es la persona a la que vamos a estar contactando para hacer una evaluación de desempeño una vez al mes o para resolver alguna duda”, comenta la directora general de Daunis.

En la experiencia de la fundación, en algunos trabajos los empleados pueden ver a los jóvenes con discapacidad intelectual como niños y es por esta razón que les quieren llamar la atención cuando es necesario o no les quieren exigir algunas cosas. “Eso se convierte en un proteccionismo”, agrega.

Rosalba Urquiza sugiere que para incluir en el trabajo a estos jóvenes es importante considerar dos aspectos: estar consciente que tienen la capacidad y competencias para trabajar, y tratarlos como cualquier otro compañero.

Las fortalezas de los jóvenes Down
Los jóvenes con síndrome de Down no sólo mejoran el clima laboral, por sus fortalezas, pueden aportar mucho a las empresas.

Estos jóvenes se caracterizan por trabajar sistemáticamente, es decir, paso a paso, por lo que en los procesos productivos que no pueden alterarse, son muy efectivos, es casi imposible que alteren el proceso. Además, los trabajadores son muy honestos, lo que es ideal para el sector financiero y aduanal.

En su Guía para la inclusión de personas con discapacidad en el lugar de trabajo, la OIT especifica que los empleadores podrían aprovechar habilidades que les son más fáciles a esas personas. Por ejemplo, “desarrollan muy bien tareas repetitivas”.

El documento destaca que contratar a alguien con síndrome de Down mejora la reputación corporativa en el mercado. La imagen de la empresa se beneficia también al interior de ésta, se desarrolla orgullo de pertenencia a un centro de trabajo que respeta e integra a personas con discapacidad.

*MOVILIDAD URBANA.*

NUEVA YORK COBRARÁ POR CIRCULAR EN AUTO EN LA ZONA DE MANHATTAN
Circular en coche desde Central Park hasta el sur de Manhattan va a ser muy caro: pronto costará más de 10 de dólares al día para los vehículos de particulares, cifra que subirá hasta los 25 dólares en el caso de las camionetas.

Nueva York se convertirá, así, en el plazo de dos años, en la gran primera ciudad de los Estados Unidos en aplicar un sistema de peaje para los que conduzcan por su zona más congestionada en la Gran Manzana.

La medida tiene un objetivo medioambiental, pero, sobre todo, su ambición será financiera: recaudar lo suficiente para poder modernizar su anticuada red de metro y de cercanías.

El objetivo del plan, promovido por el gobernador Andrew Cuomo y que acaba de ser bendecido por el Legislativo neoyorquino, es destinar el dinero que se recaude con el peaje electrónico a la modernización modernizar el transporte público, para así hacerlo más eficiente y permitiendo mover a más gente.

Eso, a su vez, redundará en una mejora en el combate contra la polución derivada de la congestión. Según los primeros cálculos, el sistema permitirá recaudar hasta 1.000 millones de dólares cada año.

Si todo va según lo planeado, el nuevo esquema de peajes entrará en vigor en enero de 2021 y cubrirá una zona que compre desde la calle 60 hasta el distrito financiero. Allí, la velocidad media es de 4,7 millas (7,5 kilómetros) por hora.

La mayoría de los días, como ha profundizado Cuomo, es bastante más rápido bajarse del coche e ir andando. En los últimos cinco años, además, se han sumado 80.000 vehículos que ofrecen servicios alternativos al taxi, principalmente operados por Uber y su rival Lyft.

Los detalles del sistema que obligará a pasar por caja a los conductores son todavía escasos. Un panel de expertos debe establecer durante el próximo año como se va a modular y aplicar.

Sí se sabe que el precio será variable, en función de la densidad de tráfico que haya en el momento de entrar en la zona de congestión. La aprobación del concepto, sin embargo, está creando gran expectación. “La experiencia de Nueva York será un importante precedente”, señalan desde la National Association of City Transportation Officials.

John Rennie, profesor de Política Pública en la Universidad de Baltimore, explica que el peaje funciona como los billetes de avión. “Elevando el precio”, señala, “se fuerza al usuario a pensar cuál es el coste de hacer el viaje y en evaluar las alternativas de transporte que tienen”.

“Está demostrado que el precio afecta al comportamiento humano. Se cambian los horarios, las rutas o se concentran los viajes”. En este caso, además, hasta ahora era gratis.

Otras ciudades
Los taxis en Nueva York y otros servicios de transporte alternativo como Uber o las limusinas ya cobran al cliente una tarifa extra de 2,75 dólares para circular por el distrito de negocios.

Ahora, esa tasa se amplía a vehículos privados y comerciales. El peaje se cobrará de manera automática, con la misma tecnología E-ZPass que ya existe en los túneles y puentes que conectan la isla de Manhattan con Nueva Jersey y los barrios de Brooklyn, Queens y el Bronx.

Otras grandes ciudades estadounidenses, como Boston, Seattle, Los Ángeles y San Francisco, también contemplan establecer un sistema similar para reducir los atascos y dotarse de recursos adicionales para mejorar las infraestructuras.

Michael Bloomberg ya lo intentó hace años en Nueva York hace diez años, cuando era alcalde de la ciudad de los rascacielos. Pero fracasó por el rechazo de los vecinos o dueños de negocios que viven fuera de Manhattan o que se haya desplazado desde los suburbios.

Bill de Blasio, el actual alcalde de la ciudad más poblada de EE UU, tanteó como alternativa con impuesto a las grandes fortunas.

“Si queremos que la ciudad siga creciendo”, defendía Cuomo hace unos días, “es indispensable ser capaz de moverse”. El dinero que se recaude irá a una “caja cerrada” destinada exclusivamente a modernizar la infraestructura de transporte y el 80% de los fondos se concentrará únicamente en la red de transporte público de la ciudad.

El resto se repartirá a partes iguales entre el servicio de trenes de cercanías que sirve a las comunidades Long Island y a los suburbios al norte.

Pero la gran incógnita es si lo recaudado será suficiente para atender las necesidades de un metro que está al borde del colapso, tras décadas lastrado por una falta de inversiones que se ha perpetuado.

El panel de expertos debe calcular exactamente lo que se espera ingresar, pero el equilibrio no es fácil, como señala el economista Charles Komanoff, ya que se quiere evitar al mismo tiempo de imponer una “doble imposición” a los que ya pagan por cruzar los puentes y túneles. Las exclusiones pueden acabar mermando la capacidad de recaudación.

Debate
Es lo que espera César Jiménez, dueño de un negocio dedicado a la reparación de viviendas que sirve a vecinos en Manhattan. Es escéptico, además, porque recuerda que buena parte de los vehículos que circulan por la isla son comerciales y no particulares.

El senador republicano Andrew Lanza, que representa a los vecinos de Staten Island, denunciaba en el debate previo que el peaje es “un nuevo impuesto que se va a cobrar a gente corriente que no puede vivir en el centro”.

Los conductores que viven en la zona de congestión, de hecho, no tendrán que pagar por circular o al desplazarse fuera, salvo al regresar cuando crucen la barrera electrónica. Se contemplan además descuentos en función de los ingresos.

Como señala Alex Matthiessen, uno de los defensores de esta iniciativa, el riesgo es que las excepciones hagan el sistema inefectivo. Para compensar, deberá subirse por otro lado.

Los fundadores de Lyft, el gran competidor de Uber, apoyan que se establezca el peaje. Creen que es un modelo que funciona, es eficiente, genera recursos para las infraestructuras, reduce la contaminación y, especialmente, agiliza los movimientos al reducir la densidad del tráfico.

Eso permite ahorrar tiempo en los desplazamientos y, añaden, mejoran el rendimiento económico de toda la ciudad. Pero defienden que el sistema sea integrado con otras formas de transporte.

*MEDIO AMBIENTE.*

LAS CIUDADES Y SUS GOBIERNOS, CLAVES PARA EL DESARROLLO SUSTENTABLE.

Al igual que la imagen de traje de chaqueta, corbata y tacones, pasillos, rascacielos y aviones que identifica a la ONU dista de las sandalias o los pies descalzos de las personas sobre quien más recae su trabajo, los discursos que abandera, globales y universales, requieren acción sobre el terreno.

Con el afán de acercar más a la población los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) e implantarlos de forma efectiva para el bienestar de cada una de las personas, las Naciones Unidas ha entendido que tiene que contar con los alcaldes y los regidores locales del mundo.

Para ello se celebra estos días en Sevilla el primer encuentro de localización de la Agenda 2030 impulsado por la organización titulada Liderazgo local, transformación global, que cuenta con cerca 200 participantes de una treintena de países.

«Al margen del marco teórico hay que pasar a la práctica. El diálogo es mundial y tiene dificultades pero en poco tiempo se ha montado esta agenda en la que el intercambio de experiencias es fundamental», declara Francisco Montalbán, embajador de la Misión Especial de la Agenda 2030 en España, organizadora de este encuentro de alto nivel en el que participará este miércoles Amina J. Mohammed, vicesecretaria general de la ONU.

Cerca del 55% de la población mundial vive en zonas urbanas, y para el 2050 está previsto que aumente hasta el 68%, unos datos que dotan de responsabilidad y capacidad de acción a los gobernantes locales.

Sus acciones pueden pasan por abastecer de agua potable a la ciudadanía, eliminar la contaminación del plástico, promover huertos urbanos, fomentar la igualdad de género, apoyar en cuestiones de salud, educación o cuidados, potenciar una alimentación sana en las escuelas, implantar nuevas tecnologías en transporte público, hacer carriles bici, parques para hacer ejercicio, facilitar el empleo…

…Son infinitas las actuaciones que desde el ámbito municipal se pueden realizar para mejorar la calidad de vida de las personas. Unas actuaciones que requieren a su vez financiación, coordinación y apoyo de estamentos superiores. «Las ciudades son el centro clave para la implementación de los ODS.

Tenemos la necesidad de forjar alianzas fuertes entre gobierno global, local, sociedad civil, sector privado y organizaciones como las agencias de la ONU.

Confianza, liderazgo y gobernanza son clave para localizarlos», ha declarado durante la inauguración Maimunah Mohd Sharif, directora de ONU-Hábitat, que ha valorado que el Ayuntamiento de Sevilla trabaje por integrar los objetivos a sus planes de acción local.
«Es difícil para un alcalde hablar a tantos años vista. Debemos ser capaces de hacer lo inmediato, pero también mirar con faros largos. Por el fortalecimiento de nuestros principios y por las oportunidades que puede dar hacer las cosas mejor en el futuro. Tenemos que ser capaces de cooperar más, entre territorios, y entre distintos niveles de Gobierno», ha declarado en la inauguración el alcalde de Sevilla, Juan Espadas, que se ha mostrado satisfecho de que de este encuentro surja el documento llamado Compromiso de Sevilla, que recogerá las intenciones acordadas.

«En este texto se busca ubicar a los Gobiernos locales y su población en el centro del desarrollo. Promover la cohesión territorial y rural-urbana, las ciudades sostenibles y las áreas rurales a través de enfoques intersectoriales, así como acuerdos de gobernanza multinivel inclusivos», avanzan fuentes diplomáticas.

«Los efectos de la globalización y de la crisis financiera ha dejado un balance de ganadores y perdedores», ha señalado el ministro de Fomento, José Luis Ávalos, que ha destacado la relevancia de reducir la desigualdad y enfrentarse al cambio climático. «Hay que establecer los derechos de nueva generación que la sociedad exige», ha añadido.

Los paneles del encuentro abarcan, entre otras, cuestiones como las innovaciones tecnológicas, la participación de la población, la capacidad transformadora del sector privado, la evaluación de las medidas implantadas, la financiación, los vínculos con el mundo rural o la juventud.

«La gente joven nos empuja a los compromisos. Podemos firmar miles de documentos pero si no los aplicamos no tendremos éxito. Lo primero que tenemos que entender es que se requiere un cambio», ha declarado Frédéric Vallier, secretario general del Consejo Europeo de Ayuntamientos y Regiones.

Ese cambio viene marcado también por las características de cada zona o región y su forma de organizar y gestionar recursos o servicios. «En Cabo Verde tenemos la característica de la insularidad y de que es un país pequeño con particularidades climáticas y desigualdad por islas, por eso hemos jerarquizado.

Y hemos hecho coincidir en un 74% nuestro programa de Gobierno con los ODS», apunta la ministra de Educación, Familia e Inclusión Social del país africano, que junto al Gobierno de Ecuador ha apoyado la organización de este encuentro, que prosigue al celebrado en Quito en 2017 en el que se estableció la Agenda Urbana 2030 como hoja de ruta para las ciudades en la aplicación de los ODS.

Maimunah Mohd Sharif ha incidido también en la implicación de la población local para el éxito de todas las medidas. «Puedes tener una agenda, pero sin la gente no se puede implementar», ha señalado. «Hay una necesidad de participación ciudadana real, que esté involucrada en las decisiones.

Y para ellas se requieren también acciones y valentía política. En las ciudades el potencial es más alto para realizar los retos globales», declara Reyes Tirado, presidenta de la red Sevilla por el Clima y miembro del Plan de Acción por el Clima y la Energía Sostenible de Sevilla (PACES), ciudad donde también se han celebrado dos Foros de Gobiernos locales, el último, este enero, con la participación de 170 delegaciones de ciudades del mundo.
«Los ODS abarcan de forma integral las necesidades del ser humano en su vida y territorio y hay que adaptarla a los planes de acción a escala local. Para ello es necesario cambiar las estructuras organizativas y en cómo nos relacionamos», ha concluido Espadas.

*ESTADOS UNIDOS.*

BIDEN, EL VICEPRESIDENTE DE OBAMA, SE COMPLICA SU CARRERA HACIA LA CASA BLANCA.
La ausencia de un nombre resulta cada vez más atronadora en la larga lista de aspirantes demócratas a derrotar a Donald Trump en las elecciones presidenciales de 2020.

Joe Biden, vicepresidente de la Administración de Barack Obama, el candidato más esperado y descontado, se demora en anunciar sus intenciones en lo que no está claro si resulta la espera a una fecha elegida en el calendario o una duda sincera, la misma que en el caso de 2016 le llevó finalmente a no presentarse frente a Hillary Clinton.

Ahora, a los 76 años, tiene delante a un rosario de rivales de todo tipo y condición frente a los que hacer valer sus casi 50 años de experiencia en la política de Washington.

Pero su largo historial tiene tanto de aval como de lastre. Resucitan episodios como su gestión del caso de Anita Hill. Desde este fin de semana se enfrenta, además, a la acusación de haberse propasado con una mujer en 2014. Este lunes se sumó otra. La era Me Too enturbia la carrera de un candidato de manual.

Lucy Flores, una activista y exlegisladora de Nevada, relató el viernes en un artículo en la revista The Cut y, acto seguido, en una entrevista en CNN, que en un mitin demócrata hace cinco años, cuando el vicepresidente acudió a respaldarla en su campaña a vicegobernadora, la agarró por detrás y la besó en la cabeza, un gesto inesperado e indeseado por ella, de entonces 35 años.

“Es algo completamente inapropiado y que deberíamos considerar en alguien que quiere presentarse a presidente”, dijo Flores en una entrevista.

Biden negó inmediatamente la acusación de haber tocado de forma indebida a esta o a cualquier mujer, pero a lo largo del fin de semana empezaron a circular fotografías de archivo del veterano político agarrando por los hombros y en otro tipo de actitudes afectivas a mujeres en actos públicos, imágenes cuyo significado se somete ahora a examen.

La bola de nieve creció el lunes. Otra mujer llamada Amy Lappos dijo que Biden la agarró de la nuca y tocó su nariz con la suya en un evento de recaudación de fondos de 2009.
Asesores de Biden recalcaron el domingo que el episodio de Flores no va a alterar su decisión de aspirar o no a la Casa Blanca, siendo como es el más popular en los sondeos, pero supone una gota más en uno de los flancos débiles de la posible candidatura del vicepresidente: el feminismo.

Senador desde los 29 años, Biden presidía el Comité de Justicia que examinó las acusaciones de acoso de Anita Hill en 1991 contra el hoy juez del Supremo Clarence Thomas, una sesión que se ha convertido en paradigma de interrogatorio machista y de culpabilización de la presunta víctima.

Aunque votó contra la nominación de Thomas para el alto tribunal, Biden permitió aquella jauría y ha tenido que pedir disculpas en varias ocasiones. La semana pasada, lo hizo de nuevo. “Se enfrentó a un comité que no entendió bien el infierno en qué consistía aquello. Hasta el día de hoy, me arrepiento de no haberle concedido el tipo de audiencia que se merecía”, dijo.

Una década antes, en el 81, se unió a los republicanos y votó a favor de un proyecto de ley que permitía a los Estados dar marcha atrás en la sentencia del Tribunal Supremo que legalizó el aborto en toda la nación, el fallo del famoso caso Roe contra Wade.

Esa ley no vio la luz, y en una segunda versión, el demócrata votó en contra, pero estos días también se ha recordado su decisión de entonces, que justificó por su educación.

Blanco, católico y de origen irlandés, Biden (Scranton, Pensilvania, 1942) entró en la política muy joven y acumula una amplia experiencia en las relaciones exteriores.

Quiere ser presidente desde al menos 1987, cuando siendo un senador de 45 años por Delaware, retiró su candidatura por un escándalo de plagio en la Escuela de Derecho, algo que admitió aunque aseguró que se trató de algo accidental. A las elecciones de 2016 acabó por no presentarse, después de mucho meditarlo.

Mucha hemeroteca a la espalda
Esta vez, en la era del Me Too, un político con tanta hemeroteca a la espalda como él necesita reforzar su compromiso de lucha contra el sexismo.
Fruto de esa inquietud se entiende que, según avanzó hace unos días The New York Times, sondease a la afroamericana Stacey Abrams, de 45 años, excandidata a la gubernatura de Georgia —con gran tirón entre jóvenes y negros—, como compañera de carrera con el fin de anunciarlo a la vez, algo infrecuente, ya que el candidato a vicepresidente suele comunicarse con las primarias ya decididas. Fue un resbalón.

Preguntada por el asunto, Abrams se limitó a responder que “nadie se presenta a una segunda plaza”.

El nutrido y diverso grupo de aspirantes enfrentan al Partido Demócrata a su ser o no ser: al dilema de si la recuperación de la Casa Blanca se encuentra girando a la izquierda (con Bernie Sanders o Elizabeth Warren) o si mantener la atracción del centro resulta imprescindible (Biden sería el máximo exponente);
si ha llegado el momento de una renovación generacional (con una candidatura como la del texano Beto O’Rourke) o se puede seguir apostando por la experiencia; si es el momento de un presidente latino (Julián Castro) o si el votante está preparado para juzgar a una mujer (como Kamala Harris o Kirsten Gillibrand) igual que a un hombre.

En el caso de Biden, el partido también se enfrenta a su pasado. Nadie como el vicepresidente encarna el legado del Obamismo, con todo lo bueno y malo que eso conlleva, pues su victoria en las primarias permitiría a Trump seguir revindicándose como la opción antiestablishment.

Biden es el candidato de manual, como en su día lo fue Hillary Clinton, y el drama demócrata de 2016 no invita a la moraleja. El vicepresidente sigue sin mostrar sus cartas, pero los expertos esperan un anuncio definitivo en abril.

*ENTRETENIMIENTO*

EL REGRESO DE “LA CASA DE PAPEL”
Después de perpetrar el atraco del siglo, los protagonistas de La casa de papel han dedicado su millonario botín a disfrutar de unas apacibles vacaciones.

Pero el próximo 19 de julio este merecido descanso llegará a su fin con el estreno de la tercera temporada del drama en Netflix.
El gigante del streaming acaba de anunciar el regreso de la serie, una exitosa producción de Atresmedia y Vancouver Media que continúa su recorrido como un original de Netflix.

Como se puede apreciar en el tráiler, de apenas 30 segundos, los nuevos capítulos estarán protagonizados por los ya conocidos Álvaro Morte, Itziar Ituño, Úrsula Corberó, Miguel Herrán, Alba Flores, Darko Peric, Jaime Lorente y Esther Acebo.
Poco se sabe de esta nueva entrega más allá de que contará otro atraco. Entre las novedades, se incorporan al reparto Najwa Nimri (Vis a vis, Quién te cantará) como Alicia, Hovik Keuchkerian (El hombre que mató a Don Quijote, Toro) en el papel de Bogotá, Fernando Cayo (Amar es para siempre, La señora) será Tamayo y Rodrigo de la Serna (Cien años de perdón, Camino a La Paz) interpretará a El Ingeniero.

Álex Pina es el creador de La casa de papel, una serie de 15 capítulos de 70 minutos estrenada por Antena 3 en mayo de 2017. Tras finalizar sus emisiones ese mismo mes de noviembre, el drama pasó al catálogo de Netflix con un formato más internacional: dos temporadas de 13 y 11 episodios de 45 minutos cada una.
La casa de papel se convirtió así en un fenómeno global hasta el punto de convertirse en la serie de habla no inglesa más vista de la historia de Netflix. Como colofón, el pasado mes de noviembre hizo historia convirtiéndose en la primera serie española en ganar el Emmy Internacional al mejor drama, prestigio premio concedido por la International Academy of Television Arts & Sciences.

*DEPORTES.*

SARAPEROS, RECONSTRUYENDO LA GRANDEZA.

Cuatro grandes triunfos en cuatro días de pretemporada. Dos contra Acereros y dos contra los Sultanes. El de anoche ante estadio lleno, con un gran ambiente, y con una exhibición de la garra y la competitividad que todos esperábamos ver.
Que buena muestra de pitcheo, que después de la primera entrada bajó la cortina y en los siguientes ocho capítulos  solo permitió una carrera. Que buena dirección del Chapo Vizcarra. Una muy buena victoria…y con causa.
Que bueno que la gente pudo constatar todo lo que se le está haciendo al Madero, para que acudir a un partido sea una experiencia más agradable. Crece la confianza…se siente el optimismo.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *