Por donde se vea y pese a querer encontrar un lado positivo las elecciones del Poder Judicial no son otra cosa que una tomada de pelo. 

De manera muy sencilla explicamos por que, de inicio en ninguna casilla habrá presencia de ciudadanos, antes de Morena se daba por sentado que conocidos, amigos o familiares se encontraban vigilando las urnas para dar fe de un proceso transparente, hoy todo quedara en manos de burócratas ( personal del INE ) 

Antes para tener certeza de que se respetaba el voto ciudadano en cada domicilio en donde se sufragaba al final se realizaba el conteo de los votos emitidos uno a uno y a la vista de todos, hoy con Morena el conteo se realizara de forma privada, en lugar distinto a donde se encontraba la casilla, en lo obscuro, sin ninguna trasparencia y un pequeño grupo de personas seleccionadas por el oficialismo emitirán el resultado. 

La gente solo podrá votar por los funcionarios que Morena disponga dejando fuera de la elección a otros que igual podrían por jurisdicción atender proceso o juicio que por domicilio le correspondía al ciudadano. 

Toda la fiscalización se realizara mediante el INE, es decir que solo ellos podrán decir cuanto se gastaron los candidatos, si se respetaron los topes, e incluso de manera unipersonal decidirán a quien multan e incluso a quien le anulan el triunfo basado en sus criterios. 

No se respeta la autonomía de los Estados pues les eliminan el derecho a decidir formato de boletas e impresión de las mismas. 

Un proceso obscuro, sin claridad, con reglas contradictorias con candidatos elegidos previamente de forma parcial que en resumidas cuentas es toda una farsa.