AVISO DE CURVA Rubén Olvera Marines

22 julio 2022
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La economía de Coahuila crece en forma de W

Después de la crisis de 2009, la trayectoria del crecimiento económico de Coahuila tomó la forma de una W. Primero sucedió una abrupta caída, inmediatamente sobrevino una fuerte recuperación que se extendió hasta mediados de 2012, le siguió un descenso que perduró seis trimestres y posteriormente otra leve recuperación durante todo el 2014. 

La gran incógnita surge en Coahuila luego de la crisis económica de 2020. ¿Cuál de las letras del abecedario describiría el itinerario que tome la economía estatal rumbo a su recuperación? L, U, V y W son las más utilizadas por los economistas. 

Por lo pronto, el Indicador Trimestral de la Actividad Económica Estatal (ITAEE) presentado por el INEGI, muestra que en el cuarto trimestre de 2021 Coahuila sufrió una caída de -2.5%. Si añadimos que en los tres trimestres anteriores el indicador referido mostró una recuperación de 1.4%, 26.8% y 0.7%, en comparación con un crecimiento negativo registrado durante los cuatro trimestres de 2020, inferimos que, como sucedió entre 2009 y 2014, la economía estatal se encamina a formar una nueva W.

El trazo de la consonante inició con el desplome durante 2020, incluyendo una caída histórica de -25.7% en el segundo trimestre, luego tres trimestres consecutivos con un crecimiento positivo en 2021, destacando una tasa record de 26.8% en el segundo trimestre, hasta que en el cuarto trimestre la economía estatal volvió a descender. 

Para sellar la W, la economía de Coahuila tendría que mostrar signos de recuperación a partir del primer trimestre de 2022. Asimismo, sostener el crecimiento durante varios trimestres hasta dibujar una meseta en lugar de un pico en la parte alta de la W. 

Una meseta significa alcanzar un periodo prolongado de crecimiento positivo, lo cual serviría para que la economía estatal, el empleo, el ingreso y el bienestar de la población regresen, lo más pronto posible, a los niveles previos a la crisis. Así sucedió luego del hundimiento de 2009. Entre 2010 y 2012, la economía de Coahuila logró 12 trimestres consecutivos con crecimiento por arriba del cero, hasta que en 2013 el ITAEE volvió a colapsar. 

Es curioso, pero desde la crisis de 1983 la historia económica de Coahuila se describe por la constante formación de la letra W coronada con una meseta. 

Cuando la economía se contrae, inmediatamente le sigue un periodo sostenido de recuperación, alcanzando, en algunos casos, hasta 25 trimestres con un ITAEE positivo. Así sucedió de 1989 a 1995, posterior a la caída de finales de 1988. Lo mismo se presentó en la fase que le siguió a la crisis de 1995 provocada por el “error de diciembre”, logrando 21 trimestres consecutivos de crecimiento entre 1996 y 2001.

¿Nos enseña algo la historia económica del estado y la invariable formación de la W con meseta? En definitiva. Veamos.  

Si la economía de Coahuila continúa con tasas de crecimiento negativo durante los primeros trimestres de 2022, por primera vez en muchos años no se formaría la meseta en la parte alta de la W.

Desde mi punto de vista, esta planicie de crecimiento sostenido durante varios trimestres ha permitido al estado reponerse rápidamente de las adversidades económicas y ser reconocida como una de las economías con mayor resiliencia del país. 

Un error estratégico sería pensar que Coahuila salió de la crisis al registrar en 2021 tres trimestres consecutivos con crecimiento positivo. En realidad, como ilustra la historia, apenas se logró un leve respiro.

Entonces, el papel de las autoridades y de los sectores productivos del estado sería el de plantear y ejecutar un nuevo programa para la recuperación de la economía. 

Solo después de 10 o 12 trimestres consecutivos con crecimiento positivo, se tendría permitido presumir. 

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