Cómo viajar con un salmón

“Los libros no están hechos para ser creídos, sino para ser sometidos a preguntas. Cuando consideramos un libro, no debemos preguntarnos qué dice, sino, qué significa”. Umberto Eco.

Con frecuencia para comprender la historia y los momentos que como humanidad vamos explorando, resulta muy útil prestar atención a distintas formas de mirar, de apreciar cosas, situaciones y contenidos. Por ello, se agradece la existencia y disposición de los escritores que a la par de su trabajo literario habitual, se dan la oportunidad de compartir su muy particular apreciación de la vida en columnas de opinión y aportes de publicación periódica.  

Poco antes de fallecer en 2016, el maestro Umberto Eco hizo una compilación de sus artículos periodísticos publicados a partir de 1986 en la última página de la revista “L´ Espresso”, ofrecidos en un volumen que tituló: “Cómo viajar con un salmón” publicado originalmente por editorial “La Nave di Teseo” ese mismo año, y posteriormente, traducido y publicado por editorial Lumen en España, durante 2020.

Y aunque pareciera que casi treinta años de distancia crean una burbuja de tiempo considerable, nos encontramos con apuntes de la vida cotidiana tan frescos como un salmón recién capturado en los mares del hemisferio norte. Precisamente, el título del libro hace referencia a un artículo muy simpático, en el que durante uno de sus viajes el autor intenta mantener un salmón recién comprado, a salvo del personal del hotel donde se aloja, quienes se empecinan una y otra vez en sacar del minibar el tesoro culinario del escritor. Atenderemos entonces también, sus recomendaciones acerca de: cómo comer en el avión; presentar en televisión; desmentir un desmentido; pasar una aduana; reaccionar ante caras conocidas; no usar el teléfono móvil y más de 40 reflexiones vistas desde la óptica extraordinaria de uno de los filósofos más influyentes de los últimos tiempos, pues como bien apunta Juan Cruz del periódico El País sobre el propio Umberto Eco: “Un sabio que sabía todas las cosas simulando que las ignoraba para seguir estudiando”.

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