A través de una carta para Nuevo León, destacó que desde que su hija Mariel llegó a su vida, siempre está pensando en el futuro, en su futuro, que constantemente piensa en qué puede hacer para que el estado sea un mejor lugar para ella y para todas las niñas y niños.

“Quiero que sea feliz, que no le falte nada, que no sufra, alejarla de todo lo que pueda hacerle daño. Supongo que eso significa ser papá, querer hacer lo imposible para que nuestros hijos estén a salvo y bien”, agregó.

El gobernador subrayó que se ha avanzado en atención médica, educación, espacios públicos, apoyos y en diversos temas para mejorar el presente de las niñas y niños, pero pensando en futuro hay dos temas importantísimos en los que deben de trabajar: agua y aire.

Indicó que si bien en el tema del agua se ha avanzado mucho, con obra, tecnología; en el del aire es diferente porque si bien se reconoció en la nueva Constitución el derecho a un medio ambiente sano, al aire limpio y a las energías renovables, se creó la Secretaría de Medio Ambiente, una nueva Agencia de la Calidad del Aire, entre otras, no son suficientes “si no arrancamos el problema de raíz”.

“No puede ser que, en Nuevo León, la tierra de Tesla, de la electromovilidad, del futuro, de
los sueños, tengamos una refinería dentro de la ciudad. Es absurdo que se ponga en juego la salud de nuestros niños y niñas por la obstinación de mantener una fuente de energía del pasado”, destacó García Sepulveda.