Los últimos momentos de Orión Hernández: alcanzaron a salvar a sus amigos antes de ser capturados por Hamás

25 mayo 2024
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Este viernes el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador confirmó la muerte de Orión Hernández Radoux, quien fue secuestrado en Israel durante el festival musical por la paz Nova en el Kibbutz Nir Oz por rebeldes de Hamás, a unos tres kilómetros de la Franja de Gaza. Indicó que hicieron “todo para salvarle la vida”, sin embargo también declaró que su muerte pudo ocurrir cerca del 7 de octubre de 2023, el día de la masacre durante la irrupción de los guerrilleros palestinos; su familia tenía la esperanza que siguiera con vida, lo cual no ocurrió.

El primer mandatario señaló que la otra mexicana que había sido secuestrada, Ilana Gritzewsky, se encuentra bien de salud tras ser liberada el 30 de noviembre de 2023. En ese entonces la secretaria de Relaciones Exteriores de México, Alicia Bárcena, informó de su liberación de la mexicana gracias a la mediación del Gobierno de Qatar. La funcionaria añadió en esa oportunidad que continuaba trabajando por la liberación de Orión Hernández.

El joven de 31 años, hijo de madre francesa y padre mexicano era productor y organizador de festivales con una profunda pasión por la música electrónica. Era padre de una pequeña niña y estaba separado de la madre de ésta, posteriormente volvió a encontrar el amor junto a Shani Louk, la joven germano-isaelí de 21 años quien también fue secuestrada por Hamás y se logró identificar en videos debido a sus características rastas (dreadlocks) y vestimenta en la parte trasera de una camioneta donde su cuerpo fue exhibido por los terroristas.

El día del ataque

Al ver la irrupción de los mercenarios en el festival Orión Hernández, Shani Louk y su amigo Keshet, abordaron un auto para tratar de alejarse del lugar, sin embargo, fueron interceptados, contó su padre, Sergio Hernández, en una entrevista con CNN en Español en enero de este año.

“Un mexicano no tiene por qué estar ahí más que por el accidente de haber estado en la fiesta de la paz”, dijo en entrevista para la televisora.

Hernández dijo que la situación se volvió cada vez más difícil. “Al principio piensas que se va a resolver pronto, pero cuando pasa el tiempo se torna mucho más oscuro (…) cuando te pones a pensar si le falta comida, si le falta agua, si hay frío, o si vio cómo mataron a su novia”, lamentó.

“Esperanza evidentemente existe puesto que desde el 7 de octubre presumimos que está vivo porque (sus amigos) hablaron al teléfono de Orión y un terrorista o una persona de Hamás dijo que Orión estaba vivo, que lo tenían prisionero y que iba a ser usado como intercambio para fines políticos”, relató con la esperanza que su hijo se encontrara vivo aunuqe secuestrado.

Describió que pensaba que Orión tal vez pudo manejar la situación como rehen debido a que tenía un don para hacer amigos: “es alguien que sabe moverse y sabe cómo tratar a la gente”.

En ese momento también Hernández pidió un alto el fuego para que los rehenes pudieran salir.

Sergio Hernández tenía la esperanza de que Orión estuviera entre los primeros liberados porque era extranjero, incluso entre el 26 y 27 de octubre servicios de inteligencia israelíes señalaron que tenían información de que todavía estaba vivo como rehén. Pero cuando salieron en libertad 24 rehenes, el 24 de noviembre, como parte de un acuerdo entre Israel y el grupo islamista, su hijo no estaba entre ellos.

Orión Hernández Radoux, vivió en Tepotzotlán, Oaxaca, Cancún y diversas ciudades de Riviera Maya. Así mismo, viajaba frecuentemente a Europa ya que su madre es francesa, dedicada a ser pintora quien reside en Labastide-Saint-George (Tarn), cerca de Toulouse, después de haber vivido 25 años en México.

En una entrevista en enero para AFP, la madre de Orión, Marie pidió al gobierno israelí y a Hamás un “alto el fuego, o al menos una tregua, para poder liberar a los rehenes”.

“Para los rehenes, para los civiles, para los niños, para las familias, para todos estos cientos y cientos de personas inocentes, debe haber un alto el fuego”, declaró. Lo peor, dijo esta mujer de 62 años, “es la ausencia de señales de vida, la angustia del no saber y la espera interminable”.

“Últimamente, efectivamente, mi ansiedad ha aumentado. Estoy cada vez peor porque…” Duda, se envuelve en su chal azul verdoso como para protegerse del mundo exterior: “No hay palabras para explicar lo que podemos sentir, (…) de ira a la tristeza, a la ansiedad, a la angustia, a las pesadillas”.

Shani Louk, un alma joven libre

Shani Louk era muy joven, pero su alma aventurera la llevó a viajar por el mundo junto a sus amigas en festivales de música electrónica, pasión que compartía con Orión Hernández y que los reuniría en el amor. Tras uno de esos raves y al conocer al franco-mexicano, Shani se quedó en México y paseó en las ancestrales pirámides de Teotihuacán junto a su amiga Avivit, al igual que bellas playas.

“Orion y Shani eran pareja. Shani es mi mejor amiga, con ella y con Orion viajé mucho por el mundo durante el último año. Mi corazón se rompe en pedazos, realmente son las personas más cercanas a mí en el mundo. Con toda el alma espero que esté vivo”, dijo Avivit a Infobae México, una joven israelí quien acompañó a la pareja en sus aventuras en México y el mundo tras la muerte de Shani.

La joven fue un rostro emblemático de esta masacre ya que su cuerpo fue identificado en la batea de una camioneta llevado por los terroristas, sin embargo cientos de sus amigos e incluso gente que no la conocía pero que se sintió empatía por su historia y la terrible situación que le ocurrió, compartieron bellos mensajes de lo positiva que era Shani, su forma de ver el mundo y el bien en cada aspecto de la vida aunque fuera difícil.

Kheset logró avisar a sus amigos y salvarles la vida

El otro joven que acompañaba a Orión y a Shani era Keshet, de 21 años, quien era protector de los animales y creía en ideales para hacer un mundo mejor al igual que sus amigos, así lo recordaron en redes sociales.

El padre de Orión detalló que supo por sus amigos que su hijo que Shani y Keshet viajaban en el mismo auto para tratar de escapar de la barbarie de Hamás, les pidieron salir del auto y aunque ellos dijeron que no estaban armados aún así les depararon. Orión y Shani fueron separados y secuestrados, pero como Keshet tenía una herida de bala en la pierna y estaba sangrando decidieron no llevarlo y matarlo ahí mismo, sin embargo en los últimos instantes de su vida logró avisar a sus amigos que venían en el auto de atrás que tomaran otra ruta porque ellos habían sido emboscados.

El miércoles 11 de octubre, la policía le avisó a Natalia, la madre de Keshet, que habían identificado a su hijo entre los fallecidos.

“Terminó la parte de esperar. Y agradezco la respuesta que recibí. Aunque la respuesta es tan fea y terrible, sé dónde está mi hijo”, dijo.

La palabra Keshet significa arcoíris. Sus hermanas llevan por nombre las palabras en hebreo para nombrar al sol y a las nubes.

Natalia homenajeó a su hijo al ser Dj en un festival, como una forma para ilustrar la historia de vida de su hijo y su amor por la música:

“Cuando están en la pista, no hay diferencias, no hay derecha-izquierda. No existen colores ni religiones, existen solo los corazones y el momento sagrado del festival, cuando amanece y todos están juntos, como un corazón. Y así justo fue mi hijo siempre”, dijo a medios de comunicación.

Keshet, de 21 años, vivía en el Kibbutz Samar. Su madre dijo que lo último que supieron de él fue cuando llamó a su amigo esa mañana y le dijo que estaba herido y que “algo malo está pasando”.

Detalló que más tarde descubrió que su compañero de fiesta Motti Zoherman, de 73 años, intentó ayudar a Keshet a escapar y que fueron asesinados juntos en su automóvil.

Keshet estuvo desaparecido durante cuatro días hasta que localizaron su cuerpo y lo declararon muerto. Fue enterrado el 12 de octubre en el Kibbutz Samar. Le sobreviven sus padres, Natalia y Laurent, y sus dos hermanas, Anan y Shemesh.

Sus amigos han hecho campañas a su nombre para hacer buenas obras, ayudar a los necesitados y por el bienestar animal.

Sus familias y amigos quieren que sean recordados como seres llenos de luz, gentiles y que dejaron huella en los corazones de todos los que estuvieron a su alrededor.

 

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