Los niveles de aprobación de de López Obrador continúan a la baja, atendiendo diversas encuestas y sacando la media entre los resultados que arrojan el porcentaje que hoy alcanza es de apenas el 56% muy inferior a la que tenia al inicio de su mandato e incluso inferior a la que en su tiempo lograban Calderón y Peña Nieto en los mismos tiempos de gestión, es decir en el cuarto año de gobierno los anteriores Presidentes tuvieron mayor nivel de aceptación de la que tiene hoy López Obrador.

En tan solo dos meses la aprobación a decrecido en un 7%, se espera que la tendencia a la baja aumente en próximos días, esto generado por los ataques realizados al gremio de médicos al igual que los ataques realizados a la UNAM, como también a su declaración referente al interés de dar protección a grupos criminales.

Hoy en día lo único que sostiene al Presidente López Obrador son sus programas con fines electorales y que consisten en la repartición de recursos públicos, programas que no tienen una finalidad real o propósito fundado pues no abaten la pobreza, no mejoran los niveles de vida y tampoco generan un crecimiento económico, a la fecha no se cuenta con ninguna medición real del impacto que fuera del interés electoral hubieran logrado esas dádivas económicas.

De continuar la tendencia a la baja observada como constante López Obrador podría ser el Presidente peor evaluado cuando transcurra su último año de Gobierno