Por temor a sismos, el Gobierno de Reino Unido suspendió de forma inmediata la fracturación hidráulica, técnica mejor conocida técnica como ‘fracking’.
Esta decisión da un a la postura del primer ministro Boris Johnson, que apoyo en un primer momento el ‘fracking’ como «una noticia gloriosa para la humanidad»
Sin embargo de acuerdo con las autoridades británicas, hay temor a que «cause demasiadas perturbaciones a través de los temblores de tierra». Esto después de que una fuente oficial advirtiera que es imposible predecir la magnitud de los movimientos sísmicos que provoca.
El departamento de Negocios y Energía precisó que que la medida durará hasta que se demuestre que esta técnica puede llevarse a cabo «de forma segura» en el país.
Lo anterior provocó que en agosto pasado en el noroeste de Inglaterra, los lugareños protestarán en contra de la empresa.
Greenpeace aplaudió la decisión de suspender el uso de ‘fracking’ por parte de Reino Unido.
Y es que dijo que la propuesta del Gobierno por de esa técnica «es un fracaso», por lo que llamó a utilizar las energías renovables como la eólica, la solar o la geotérmica.
La agencia Reuters, retomada por RT, señala que Londres se ha fijado el objetivo de convertirse en un país con cero emisiones de carbono para el 2050.