Una de las historias más conocidas de Saltillo es la Leyenda de la delgadina, la cual es un triste relato de una historia ocurrida a finales del siglo 18, dicen que en esa zona vivía una pareja muy particular,

Se trataba de un grande y corpulento carnicero que vivía con su esposa que era igualmente grande, juntos parecían vivir bien y felices, pero un día la fatalidad se cruzó en su camino.

Dicen que un día el Carnicero encontró a su esposa engañándolo con uno de sus empleados, desde ese día nadie más volvió a ver a la mujer, durante meses todos se preguntaban donde estaba hasta que un día vieron su cuerpo en un ángulo del rio, todos la reconocieron al instante debido a su curpulecian pero estaba totalmente delgada, asegura el relato que su marido al descubrir el engaño la encerró y la alimento durante mucho tiempo a migajas hasta que finalmente falleció, nunca más se volvió a ver al carnicero, pero desde ese entonces se conoce a aquel sitio como el callejón de la delgadina, aunque el apodo también puede deberse al apellido de la mujer, el cual era Isaura Delgado.