RECETA VEGANA:Crepa sin gluten con verduras de estación

25 junio 2022
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Ingredientes para 3 – 4 crepes:

1 taza de harina de trigo sarraceno ecológica

1,5 tazas de agua

Una pizca de sal

Ingredientes para el relleno:

Tahin

Pepino cortado a rodajas

Aguacate

Rúcula

*Chucrut

Cilantro

Elaboración:

Mezcla los ingredientes para el relleno y deja que reposen. Cuando reposa, normalmente la mezcla se vuelve un poquito más espesa, ajusta de agua si fuera necesario.

Mientras corta el pepino a rodajas, añade una pizca de sal y mezcla bien, deja que repose.

Calienta una crepera y elabora tu crepe con la ayuda del esparcidor de madera para crepes.

Cuando esté dorado por un lado, dale la vuelta con la ayuda de una espátula.

Coloca el crepe en un plato y unta la base con un poco de tahin.

Coloca en el centro unas rodajas de pepino.

Pon encima unas rodajas de aguacte recién cortado, unas hebritas de chucrut y unas hojita de rúcula.

Si te gusta el cilantro, añade bien de cilantro y cierra el crepe plegando los dos extremos que se han quedado sin verdura hacia el centro para que envuelvan el relleno.

Cómo hacer chucrut casero

Dificultad: Fácil
  • Tiempo total

Limpiamos bien el repollo, retirando las hojas exteriores que estén feas. Cortamos en cuartos, retiramos el tronco central y lo pesamos. En nuestro caso ha sido 1,200 kg. Este dato es esencial para calcular bien la cantidad de sal gruesa, que habrá de ser el 2% del peso del repollo. En este caso, 24 gramos.

Con un cuchillo bien afilado o una mandolina cortamos el repollo en tiras finas. Lo introducimos en un recipiente amplio y hondo, añadimos la sal gruesa y, con las manos bien limpias, masajeamos para que la sal llegue a todas las tiras de repollo. Dejamos reposar durante seis horas, tiempo durante el cual la sal hará que la col suelte sus jugos.

Transcurrido el tiempo de reposo, si el repollo no ha quedado cubierto de líquido en su totalidad (dependerá del tipo de col que usemos), añadimos agua hervida y enfriada hasta cubrir. Colocamos algo de peso sobre el repollo para que quede completamente sumergido en líquido (nosotros hemos usado un plato y un mortero), cubrimos con un trapo de cocina y dejamos fermentar durante un par de semanas como mínimo.

La temperatura ideal de fermentación oscila entre los 18ºC y 20ºC, conviene que el lugar en el que lo dejemos fermentar sea fresco y seco. En cuestión de pocas horas se empiezan a ver burbujas de CO2 ascendiendo a la superficie, esto es perfectamente normal. A medida que pasan los días el repollo se vuelve más tierno y el sabor más ácido.

 

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