PASO A PASO

1. Antes de empezar con la receta, calcularemos 1/3 de taza de aceite de girasol y lo pondremos en el congelador. Es importante que el aceite esté frío cuando lo vayamos a usar.
2. Empezaremos poniendo a macerar las manzanas. Para ello, pelamos y cortamos en gajos las tres manzanas. Os recomiendo que los gajos no sean muy gruesos para que se horneen facilmente en le horno. Las colocamos en un plato hondo.
3. Seguidamente, exprimimos los dos limones y volcamos el zumo sobre las manzanas. Removemos.
4. Añadimos media vaina de vainilla abierta, una pizca de canela en polvo, y el 1/3 de taza de edulcorante granulado. Mezclamos muy muy bien y dejamos reposar, aunque removeremos periódicamente para que el jugo de limón bañe todas las manzanas.
5. Seguidamente, preparamos la masa. Para ello, mezclamos en un bol los 270 gramos de harina de trigo con los 9 gramos de levadura y 1/2 cucharadita de canela en polvo. Mezclamos muy muy bien.
6. Añadimos las dos cucharadas soperas de Sirope de Ágave (o el edulcorante que vayas a usar para la masa) y las dos cucharadas soperas de aceite de oliva. Mezclamos.
7. Por último, añadimos los 140 ml de leche vegetal y amasamos con la ayuda de un utensilio.
8. Con las manos limpias, enharinamos ligeramente una superficie y colocamos la masa encima. Amasamos bien durante 1 o 2 minutos y dejamos reposar.
9. Vamos a por el topping crujiente típico de los Crumble.
10. Mezclamos en un bol los 150 gramos de harina de trigo con una pizca de sal, 1/4 cdita de canela en polvo y 1/3 de taza de edulcorante granulado. Mezclamos bien.
11. Retiramos del congelador y añadimos lentamente el 1/3 de taza de aceite de girasol y, en vez de simplemente remover, vamos a usar una cuchara para ir «picando» la masa, como si estuviésemos pinchandola. De esta manera facilitaremos que se hagan esas «piedrecitas» de trigo que luego servirán para darle un toque crujiente a la cubierta.
    

    Si notas que la masa está un poco «pegajosa» espolvorea un poco más de harina y vuelve a remover. El topping del Crumble ha de quedar crujiente.

12. Reservamos.
13. Ponemos a pre-calentar el horno por arriba y por abajo a 180 grados y con ventilador.
14. Ahora, recuperamos nuestra masa base y la estiramos con la ayuda de un rodillo, hasta adaptarla al tamaño de nuestro molde.
15. Engrasamos el molde con un poquito de aceite y colocamos la masa encima. Ahora, con los dedos, la ajustamos a sus esquinas.
16. Luego, recuperamos nuestras manzanas maceradas y les añadimos dos cucharadas soperas de harina. Removemos bien y las introducimos dentro del molde.
17. Para cerrar, colocamos todas las migas de trigo encima.
18. La introducimos en el horno durante unos 45 minutos, o hasta que la masa esté dorada y la manzana correctamente asada.
19. Después, la retiramos del horno y la dejamos templar antes de cortar y servir. ¡Y listo! Ya tienes tu Crumble de manzana sin mantequilla, usando aceites vegetales.