Si bien la creación de la Guardia Nacional suponía como uno de sus principales objetivos el incremento de la seguridad la realidad dista mucho de esos efectos, recordemos que como parte de la estrategia se opto por desaparecer a la Policía Federal de Caminos, de inicio se argumento que nadie seria despedido pero sucedió todo lo contrario, al paso de los años se fueron remplazando elementos por militares, amenazas de perder empleo, la advertencia de que se estancarían en sus rangos o cargos o el envío de elementos a escritorio poco a poco fue logrando que la mayoría desistiera de sus trabajos. 

Antes quienes portaban el uniforme de la Policía Federal de Caminos era gente capacitada, de carrera y la mayoría tenia preparación profesional, incluso el nivel académico era uno de los requisitos para ingresar, pasaban múltiples pruebas tanto de confianza como de capacidades físicas y de forma constante eran capacitados.

Hoy muchos de los policías que tienen asignada la vigilancia en las carreteras de México son soldados y es en ese punto donde se debe distinguir entre dos figuras dentro del ejército, unos son los que ingresan al heroico colegio militar para su formación académica y otros los que se enlistan en las filas del ejercito como soldados, estos últimos son en su mayoría los que suplieron a los policías federales de caminos, sujetos que para ingresar solo debieron cumplir mínimos requisitos entre ellos contar al menos con Secundaria terminada, acta de nacimiento, Curp , credencial para votar y buena conducta

Hoy muchos de esos soldados son quienes si saben manejar vigilan las carreteras, su instrucción es meramente militar, no saben de peritajes, investigación, labor policial y por si fuera poco carecen una preparación especializada para su función. 

Lo descrito es sin duda uno de los factores que han impedido se mejores la seguridad, incluso propician inseguridad, otra de las razones es la organización de mando pues antes se tenían operando destacamentos y bases en diversos puntos al igual que en las principales carreteras pero hoy eso dejo de existir, sus lineas de mando son muy distintas, por si fuera poco existe otro gran problema que favorece la inseguridad y la delincuencia “ No les dan Gasolina “ pareciera increíble pero es verdad. 

Racionarles el combustible impide recorridos de vigilancia, por ello no se ven patrullas en las carreteras, por eso dejaron de transitar o hacer recorridos, cada patrulla que sale cuando así lo hacen solo trae combustible para llegar a un punto en específico y retornar, incluso dado el caso de necesitar dar persecución están impedidos para realizarla en caso de que se prolongue. 

De nada sirve el haber adquirido recientemente mil unidades vehiculares si las mismas no cuentan con combustible, error garrafal pensar que se pueda igualar la eficacia y resultados que tenia la polÍcia federal de caminos con soldados de poca preparación en dicha labor y menos cuando las patrullas que se dedican a ello no tienen gasolina. 

Ahora surge la pregunta obligada,¿ le redujeron presupuesto a las labores policiales y de vigilancia en las carreteras ? de ser así por que lo aprobaron los Diputados y como esperaban que tal reducción de presupuesto no impactara en seguridad, en caso de no haber tal reducción presupuestal a donde va el dinero que antes se utilizaba para que se vigilaran caminos y carreteras, hablamos de muchos millones de pesos, cientos o miles a mes. 

La otra cuestión es entender la lógica de un Gobierno para limitar la capacidad de operación de quienes tienen a cargo velar por la seguridad de los ciudadanos ¿ Acaso es parte de un plan orquestado en beneficio de la delincuencia ? o señal de complacencia que traducido daría a entender el significado de Abrazo no Balazo.