Un joven originario de Saltillo, Coahuila, murió el pasado 28 de octubre en una fiesta de Halloween organizada en el antiguo Parque Plaza Sésamo, en la ciudad de Monterrey.

De acuerdo a versiones en redes sociales, Juan Pablo Berlanga habría caído de lo alto de una torre en el lugar, estructura a la que, supuestamente, subió por su propia cuenta.

“A mí me tocó ver como estaba aquel chico tirado en el estacionamiento del parque”, comentó en redes sociales el usuario Andrés Alexander.

El hombre de 32 años había acudido al festival en compañía de algunas personas, mismas que regresaron sin él a tierras coahuilenses, lo que despertó preocupación en sus familiares.

Trascendió, además, que a la familia de Berlanga se le entregó el coche y la cartera del joven, pero no dieron más explicaciones.

“Desde arriba, hay testigos que lo vieron y hay cámaras, ya quedó comprobado que él se aventó solo y cayó en una jardinera, entonces nadie aguanta ese golpe, estaba muy arriba”, comentó en entrevista exclusiva para este medio, Yahir Alberto García, quien fue el organizador del evento Psylloween realizado en el Parque Fiesta Aventuras, antes Parque Plaza Sésamo.

Según el testimonio de Yahir, el joven se lanzó de la estructura cuando el festival ya había terminado y empezaban a desmontar el escenario, cerca de las 2:20 de la mañana, y lo que provocó que el hombre hiciera tal cosa aparentemente fue un estado sicótico influenciado por sustancias prohibidas, sin embargo, no mencionó si había algún tipo de verificación para que los asistentes no portaran o consumieran sustancias.

El hombre de 32 años fue al festival acompañado de su pareja, así como de dos amigos DJs, quienes aseguran no enterarse de la gravedad de las lesiones que Juan Pablo sufrió, pues no estaban allí cuando se lanzó, ya que se habían ido al vehículo para calmar a la novia, quien también estaba bajo los efectos de las drogas.

“El muchacho estaba en mal estado junto con su novia, y los guardias lo abordaron y el muchacho no quiso ser atendido, y a la novia sí con suero y la estabilizaron, pero el muchacho andaba muy mal, traía a todos los guardias atrás de él y decía que se quería morir”.