Mientras por estos lados se piensa en el asado o la ensalada rusa, el vitel toné y el pan dulce, en otros sitios del mundo se eligen tradiciones algo peculiares a la hora de despedir al añoque se va o recibir al que se estrena. No siempre son costumbres sencillas, pero tal vez alguna puede ser una buena idea para hacer algo diferente esta temporada y apostar a que cambie la racha, mejore la buena o, al menos, se diviertan un poco más que de costumbre en casa.
Aquí una decena de las más exóticas.
India: la quema
En India se estila construir una escultura de un anciano y quemarla. La efigie de una persona mayor simbolizaba el año viejo e incendiarlo a medianoche es una tradición que puede verse en muchos sitios en Bombay. La quema simboliza el olvido de los malos ratos del año anterior y hace espacio para que nazca un nuevo año que aporte experiencias nuevas.
Las personas se suelen reunir para cantar “Auld Lang Syne”, una tonada escocesa que significa “hace mucho tiempo”; aunque en verdad se la utiliza en esta época como sinónimo de un brindis “por los viejos tiempos”. Una melodía que ha hecho popular en el mundo Rod Steward. Después de la quema y la canción se inicia una fiesta que, a pesar del lado cosmopolita de la ciudad en particular y en general de la India, suele reunir a todos.
Dinamarca: chau platos
En Dinamarca se opta por una costumbre que implica una ruidosa despedida del año que se va. Se trata de tirar platos viejos. Lanzar platos a los amigos, aunque en general supone que las cosas no salieron bien y pasaron a mayores, en el caso de Nochevieja en Dinamarca es todo lo contrario. Romper los platos a los pies de otros es un deseo de buena suerte.
Según la tradición, no se trata sólo de platos. De hecho, cuanto más utensilios de cocina se sumen al festín de rotura mejor será la suerte del año que entra. Es común, en esta época, ver el descarte en el escalón de ingreso de la puerta de cada casa.
Canadá: pesca sobre hielo
Ir de pesca es una de las actividades más tradicionales y generalizadas de Canadá. Casi todos los fines de semana la familia tipo sale de paseo en búsqueda de un lago donde despuntar el vicio.
Para diciembre las cosas se complican. El frío que sobrevuela en el país para esta época, más aún en este año que la ola de bajas temperaturas ha sido más cruda, deja congelados a todos los espejos de agua. Sin embargo, la experiencia se reemplaza con la pesca en el hielo
Las familias alquilan cabañas con calefacción y equipo de cocina para que puedan disfrutar de su fiesta con sus seres queridos en el lugar, hacen un hueco en la capa de hielo y apuestan a la pesca bajo el agua congelada. El éxito de la experiencia presagia la suerte que deparará el año venidero.
Grecia: cebolla por rosca
Mientras en nuestras casas penden adornos navideños en las puertas de ingreso, habitualmente roscas de pino y bolas de adorno, en Grecia para fin de año prefieren colgar una cebolla fuera de la puerta
Las cebollas no sólo son un alimento básico en la cocina de ese país, sino que también pueden traerte buena suerte para el nuevo año que se avecina. Se cree que la cebolla en la puerta de cada casa simboliza la fertilidad y el crecimiento, inspirados en su capacidad de brotar por sí sola. De este modo, las familias griegas cuelgan una cebolla en su puerta después de asistir al servicio religioso el día de Año Nuevo.
Colombia: con papa bajo el colchón
Siguiendo con el uso de elementos gastronómicos para atraer la buena fortuna, como en Grecia, los colombianos también aplican una costumbre en ese sentido, pero para ello eligen la papa.
Siguiendo esa tradición, en la víspera de Año Nuevo, los hogares colombianos tienen la tradición, llamada agüero, de colocar tres papas debajo de la cama de cada miembro de la familia, una pelada, otra sin pelar y la última pelada parcialmente. A medianoche, cada persona toma una con los ojos cerrados y, dependiendo de la papa que seleccione, puede esperar un año de buena fortuna, lucha financiera o una combinación de ambas.
Irlanda: a los golpes
Las tradiciones del cambio de año, entre otras cosas, intentan ahuyentar las malas ondas de la casa. Dejar ir las que se experimentaron en el año que termina, pero también impedir que ingresen malos augurios para el período que se inicia. Para lograrlo, en Irlanda tienen una tradición bastante particular.
Para ahuyentar a los malos espíritus que, según las leyendas locales, acechan justo a las 12 de la noche del último día del año, las familias irlandesas dan paso a un año nuevo saludable y próspero golpeando hogazas de pan de Navidad contra las paredes y las puertas de toda la casa como si fueran la baqueta de un tambor.
Escocia: con buen pie
En Escocia, el día previo al comienzo del nuevo año es tan importante que hasta tiene nombre: se trata del Hogmanay. En este día, los escoceses observan muchas tradiciones, pero una de las más famosas es el “first footing”.
Según las creencias escocesas, la primera persona que cruza el umbral de tu casa después de la medianoche del día de Año Nuevo debe ser un hombre de cabello oscuro si deseas tener buena suerte el próximo año. Tradicionalmente, estos hombres vienen con regalos como carbón, sal, galletas de manteca y whisky, todo lo cual contribuye aún más a la idea de tener buena fortuna.
Rusia: arboles sumergidos
Una costumbre relativamente moderna se ha vuelto tradición en Rusia. Desde hace 25 años dos buzos llamados Padre Escarcha y Doncella de Hielo, se aventuran en el lago congelado Baikal, el espejo de agua dulce más grande del mundo, y llevan un árbol de Año Nuevo, típicamente un abeto decorado, a más de 30 metros debajo de la superficie.
En esta época del año, la temperatura suele estar muy por debajo de cero. Sin embargo, miles de personas se acercan a celebrar este acontecimiento.
Italia: rojo por debajo
Rosa o rojo en Navidad, blanco para año nuevo; las costumbres de la vestimenta se han ido profundizando con el paso de los años, sin embargo en Italia las tradiciones vienen desde hace centurias. La tradición indica que una prenda que toque la piel debe ser roja.
En la cultura italiana, el color rojo se asocia con la fertilidad, por lo que la gente lo usa debajo de la ropa con la esperanza de que les ayude a concebir el próximo año, pero que también implique fecundidad en todos los ámbitos de la vida.
Turquía: a salar la puerta
Que se caiga en la mesa puede ser indicio de pelea. No obstante, la sal siempre ha tenido un particular papel de riqueza y exuberancia.
En Turquía, se considera de buena suerte rociar sal en la puerta de las casas tan pronto como el reloj marca la medianoche del día de Año Nuevo. Como muchas otras tradiciones de Nochevieja en todo el mundo, se dice que esta promueve tanto la paz como la prosperidad durante los nuevos 12 meses que se inician.