Lo que hoy se observa en el Estado de Guerrero podría ser lo que en un futuro se observe en todo Mexico, una entidad en donde el Crimen Organizado Gobierna y todo opera al margen de la Ley. 

Hoy Guerrero es gobernado por una familia acusada por sus nexos con el crimen organizado que solventó campañas con dinero proveniente de la delincuencia pero que ademas ante los siniestros que provoco un huracán obtuvo el beneplácito oficial para que todo opere bajo la ilegalidad. 

En Acapulco no se pagan impuestos, el comercio informal se legalizo, a los habitantes les son subsidiados los servicios publico, se les alimenta  de cientos de miles de despensas y el circulante que existe es erogado por miles de elementos de las fuerzas armadas y guardia civil que se mantiene en las ciudades cumpliendo con el único objetivo de gastar su sueldos en dicha entidad. 

La gente vive de las becas, del comercio informal, de las operaciones que realiza la delincuencia y del recurso que es erogado por las fuerzas militares y policiacas. 

No es de extrañar que simultáneamente con Guerrero otras entidades comiencen a seguir el mismo patrón, subsistir de manera artificial siendo mantenidas mediante el subsidio o la dádiva oficial conjuntamente con actividades ilícitas, exentas de pagar impuestos. 

La pregunta obligada es ¿ Cuánto puede aguantar ?  para ello es importante conocer la capacidad económica de un Gobierno Federal y de las Entidades federativas que aportan para que dicho actuar resulte posible. 

Guerrero se empieza a convertir en una replica de CUBA pero sin orden ni ley, la gente subsiste con lo que aporta el Gobierno tomando una actitud pasiva respecto que pierde el sentido de la gobernabilidad, sin aspiración y conformista, con un sentimiento de agradecimiento al paternalismo que asemeja darles lo mínimo indispensable a cambio de pedir que continúen votando por ellos. 

El rol del Gobierno federal es muy perverso pues pone a los ciudadanos de Guerrero en una disyuntiva alarmante, seguir teniendo que comer apoyándoles o enfrentar la problemática que el mismo Gobierno propicia temiendo que llegue alguien distinto a Gobernar y que los deje de mantener.