Senadores de Coahuila: ¿Podrá el PRI romper el hechizo?
La solución al enigma electoral más sonado en Coahuila se revelará finalmente el próximo domingo.
La incógnita gira en torno a las elecciones al Senado. Los analistas especulan si el PRI recuperará estas posiciones políticas después de una sequía de 24 años.
El último triunfo del PRI se produjo en 1994. Bajo el liderazgo del gobernador Rogelio Montemayor, Melchor de los Santos y Francisco Dávila obtuvieron el 48.67 % de los votos. Fue en estos comicios que Ernesto Zedillo, el candidato del PRI, ganó la carrera presidencial.
Desde las elecciones de 2000, el PRI ha ocupado la segunda posición, obteniendo solo el escaño minoritario. En ese año, Jorge Zermeño y Luis Rico Samaniego del PAN superaron a las fórmulas del PRI lideradas por Alejandro Gutiérrez. Finalmente prevaleció el impulso de la transición en apoyo al candidato presidencial Vicente Fox.
El escenario político se mantuvo sin cambios en 2006. En esa elección, Guillermo Anaya y Ernesto Saro obtuvieron una victoria decisiva con el 43.36 % de los votos. Los candidatos del PRI se quedaron atrás con el 31.87 %. Cabe señalar que durante esta elección surgió una tercera fuerza electoral, representada por Andrés Manuel López Obrador, candidato presidencial de la alianza PRD, PT y Convergencia. Los aspirantes al Senado pertenecientes a esta coalición lograron el 17.91 % de los votos. Al final, Felipe Calderón Hinojosa, del PAN, resultó vencedor en las elecciones presidenciales.
Enrique Peña Nieto, candidato presidencial del PRI en 2012, parecía tener el impulso para romper la racha de derrotas del PRI. Sin embargo, el resultado no fue el esperado. En una elección disputada, los candidatos del PAN, Luis Fernando Salazar y Silvia Garza, ganaron con el 36.15 % de los votos, derrotando por estrecho margen a los aspirantes del PRI que recibieron el 34.89 %. Mientras tanto, los candidatos a senadores del PRD-PT-MC obtuvieron el 15.37 % de los sufragios.
En 2018, la abrumadora ola electoral de López Obrador impulsó a Armando Guadiana y Eva Galáz a asegurar la victoria de Morena en Coahuila, recibiendo el 31.87 % del voto. El PRI siguió siendo un contendiente competitivo, logrando un 28.67 % de los sufragios. El PAN se convirtió en la tercera fuerza, y sus candidatos al Senado recibieron el 25.06 %.
Después de cuatro elecciones, Miguel Riquelme, ex gobernador, y María Bárbara Cepeda, ambos candidatos al Senado por el PRI, parecen decididos a romper el hechizo.
Las circunstancias juegan a su favor. Encuestas recientes indican que la alianza PRI-PAN-PRD lleva la delantera. Además, a diferencia de 2018, la tercera fuerza política no se postula de forma independiente, lo que implica que sus votos probablemente se dirijan al PRI. Vale la pena señalar que el PRI ha logrado triunfos significativos en las elecciones locales más recientes, reforzando aún más su posición.
Por su parte, Luis Fernando Salazar y Cecilia Guadiana intentan replicar el triunfo de Morena de 2018. Sus esperanzas se basan en los desafíos que enfrentan las encuestas favorables al PRI.
Históricamente, excepto en 2012, las elecciones al Senado del estado han estado correlacionadas con los resultados presidenciales. Además, los analistas se preguntan si el PAN y el PRD de Coahuila tendrán la capacidad para aportar un número significativo de votos a los candidatos de la alianza.
Si queremos resolver esta incógnita, votemos el próximo domingo.