Hecho en Coahuila
Coahuila no necesita maravillarse de las multinacionales de moda para entender el concepto de emprendimiento, ya que esta entidad puede presumir que aquí han nacido y consolido empresas de clase mundial, consideradas invencibles en el ámbito de los negocios.
Algunas de estas empresas han sobrevivido por más de un siglo, gracias a una constante reinvención de sí mismas y al uso de nuevas formas de emprender.
Las compañías bajo la marca Coahuila han sobrellevado crisis, competencia intensa, estrictas regulaciones gubernamentales, cambios en los patrones de consumo e incluso pandemias.
A lo largo de los años, estos modelos de negocio se han transformado en empresas nacionales o transnacionales, convirtiéndose en líderes en sus respectivos mercados.
Destacan algunos emprendimientos familiares, cooperativos y otros que han sido producto de la sinergia entre el sector público y el privado: una pequeña ferretera que se convirtió en el Grupo Industrial Saltillo; un almacén de telas transformado en Soriana; una cooperativa de productores de leche en el área de la Laguna, conocida internacionalmente como LALA; e incluso una siderúrgica que hoy lleva por nombre AHMSA.
Ya sea innovando formas de hacer negocios, capitalizando nuevas oportunidades de mercado o explotando las vocaciones productivas de la región, cada uno de estos emprendimientos demuestra claramente que Coahuila no solo tiene ideas para desarrollar productos y servicios de calidad, sino la capacidad de crear nuevas empresas con el ánimo de competir y escalar para convertirse en negocios invencibles de clase mundial.
Ahora bien, la verdadera razón de esta columna es enfatizar que para sintonizarse con el desarrollo empresarial de Coahuila y enfrentar las exigencias productivas y comerciales que dejo la crisis sanitaria, la política estatal de apoyo a las PyMEs y los emprendimientos familiares debe reinventarse frente a la evidencia de que, a juzgar por las nuevas condiciones de incertidumbre, competencia feroz e irrupción del consumidor digital, el modelo actual presenta signos de fatiga.
Sorprende, por ejemplo, que en los resultados presentados por el Inegi en el Estudio Demografía de los Negocios 2021, Coahuila es una de las entidades con menor porcentaje de creación de nuevas empresas, respecto a las que existían en 2019, antes de la pandemia.
En 2020, la natalidad nacional de empresas fue del 12.75%, en Coahuila llegó al 9.51%. Al mismo tiempo, mientras que la media nacional subió al 24.44% en 2021, la entidad alcanzó un 17.08%.
Con relación a la proporción de muertes de empresas, en 2020 la tasa de mortalidad a nivel nacional fue del 20.81%, Coahuila registró un 21.52%. El estado presentó un 30.78% en 2021, en tanto que en el país esa cifra se dispara a 32.61%.
Actualmente, el gobierno estatal, a través de la Secretaría de Economía, ofrece a las empresas y emprendedores una serie de apoyos articulados que van desde la desregulación para la apertura de nuevos negocios, pasando por la capacitación y el desarrollo de proveedores, hasta la creación de un portal de ventas de productos manufacturados en la entidad (Compra Coahuila) en la plataforma Mercado Libre.
Algunos analistas y emprendedores coinciden, sin embargo, en que la política pública y los planes de desarrollo empresarial deben cambiar en el próximo sexenio, entre otras causas, porque tras la pandemia los negocios cambiaron para siempre.
Una nueva política de apoyo a las pequeñas y medianas empresas en Coahuila debe lograr que los más de 100 productos que actualmente se comercializan en el portal Compra Coahuila se conviertan en miles en un período corto de tiempo