A raíz de que la presidenta municipal de Cotija, Michoacán, Yolanda Sánchez Figueroa, fuera privada de su libertad por sujetos armados en el estado de Jalisco, se dio a conocer que la funcionaria había recibido amenazas por parte del crimen organizado. Sin embargo, autoridades michoacanas dijeron no tener conocimiento sobre esta situación.
La alcaldesa fue secuestrada el domingo 24 de septiembre en el municipio de Zapopan, cuando salía del centro comercial “Plaza Antares”, localizado en la colonia Jardines de la Patria, en compañía de dos mujeres.
Cinco meses antes, en abril, había solicitado al Cabildo municipal una licencia de 60 días sin goce de sueldo. Esto con la finalidad de separarse temporalmente de su cargo, al cual regresó al cabo de 20 días.
Y es que a principios de abril, un comando armado atacó las inmediaciones de la dirección de Seguridad Pública de Cotija, lo que dejó un saldo de dos policías muertos: Sergio Armando y Armando “H”. En su momento, se reportó que la agresión tuvo que ver con los operativos que se desplegaron en la región de Ciénaga de Chapala, donde se realizaron decomisos de droga y armas.
Posteriormente, el 17 de abril, otro grupo de sujetos armados irrumpieron en las instalaciones del Ayuntamiento de Cotija y desalojaron a los policías que se encontraban en el inmueble, bajo el argumento de que eran supuestos elementos de la Guardia Civil. Primero destruyeron las cámaras de seguridad instaladas en la presidencia municipal, según reportes de Milenio.
En aquella ocasión, uno de los uniformados logró solicitar apoyo al Ejército mexicano, lo que llevó a la detención de dos hombres, uno de los cuales dijo ser parte de una organización criminal. Aunque no especificó cuál, se presume que se trataba del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
Posterior a estos eventos, Orlando Omar Nava Badillo intentó tomar protesta como director de Seguridad Pública del municipio de Cotija, bajo instrucciones de José Alfredo Ortega Reyes, secretario estatal de Seguridad. No obstante, no logró asumir el cargo dado que su designación había sido ilegal.
Pese a estos hechos, el secretario de Gobierno estatal, Carlos Torres Piña, aseguró que Yolanda Sánchez no había manifestado algún inconveniente en cuanto a su seguridad personal. “Nunca se tuvo ningún reporte de amenazas, me reuní con ella en varias ocasiones y fui a visitarla a Cotija y nunca me comentó nada de amenazas”, señaló el funcionario ante la prensa local el pasado domingo.
En ese sentido, Torres Piña indicó que la alcaldesa de Cotija no disponía de guardaespaldas en su día a día, aún cuando se tenía conocimiento de que en la zona había presencia de células del crimen organizado, situación por la cual se solicitó apoyo a la Guardia Nacional.
De manera contraria, el secretario general del Partido Acción Nacional (PAN) en Michoacán, Javier Estrada Cárdenas, señaló que la alcaldesa sí estaba consternada por el panorama de violencia y la irrupción de grupos delincuenciales al municipios.
“Es una militante del PAN, una buena persona. En algunas ocasiones refería que se sentía un poco agobiada por la presencia de grupos del crimen organizado, Son temas muy delicados y difíciles de comentar en vivo (…) No sabemos si la presionaban de alguna u otra manera”, comentó Estrada en entrevista para Quadratín.
Ante estos hechos, la Fiscalía de Jalisco informó que la búsqueda de Yolanda Sánchez se extendió a tres municipios: Guadalajara, Tlajomulco de Zúñiga y Zapopan. Sin embargo, hasta el momento se desconoce su paradero. Se presume que detrás de esta privación de la libertad estaría el CJNG, aunque las autoridades no lo han confirmado.
Información de: Infobae