Esta infusión posee importantes propiedades que favorecen la pérdida de peso y la prevención del envejecimiento.
Sin duda existen muchas excelentes opciones de tés e infusiones que aportan antioxidantes y que tienen muchos beneficios para la salud; sin embargo, siempre existen algunos que pueden ser más efectivos que otros.
Tal es el caso del poco conocido (pero muy efectivo) té blanco, el cual, a pesar de tener hasta 12 veces más antioxidantes que el té verde, es mucho menos conocido.
Y es que el té blanco es una variedad de té que se elabora a partir de las hojas y brotes jóvenes de la planta Camellia sinensis, la cual se caracteriza por ser uno de los tés menos procesados que existen actualmente en el mercado, lo que ayuda a conservar su contenido en antioxidantes y otros compuestos beneficiosos.
Después de la cosecha, las hojas y brotes de la planta se marchitan ligeramente al sol y luego se secan; Este procesamiento simple mantiene la mayor parte de los nutrientes intactos, razón por la cual el té blanco tiene un sabor más suave y menos astringente que otras variedades de té, como el té verde o el té negro.
Su nombre se debe al particular tono que adquieren las hojas secas, el cual suele ser de color plata, dando al té un color similar al blanco.
Por qué el té blanco ayuda a perder peso
Entre muchos otros beneficios, uno que destaca es que el té blanco puede contribuir a la pérdida de peso debido a sus compuestos activos. A continuación se detallan los mecanismos por los cuales el té blanco puede ayudar en este proceso:
- Aumento del metabolismo: Los polifenoles y catequinas presentes en el té blanco pueden aumentar la tasa metabólica basal, lo que significa que el cuerpo quema más calorías en reposo. Esto favorece la pérdida de peso al aumentar el gasto energético diario.
- Estimulación de la quema de grasas: Estudios sugieren que los compuestos del té blanco, como la cafeína y las catequinas, pueden potenciar la lipólisis, que es el proceso mediante el cual el cuerpo descompone las grasas almacenadas para usarlas como energía.
- Inhibición de la formación de nuevas células grasas: Algunas investigaciones indican que el extracto de té blanco puede inhibir la adipogénesis, el proceso a través del cual se forman nuevas células grasas. Esto podría ayudar a reducir la acumulación de grasa en el cuerpo.
- Efecto saciante: Beber té blanco puede ayudar a controlar el apetito y reducir los antojos, lo que puede llevar a una reducción en la ingesta calórica total. Consumir té blanco entre comidas puede ayudar a reducir el consumo de snacks poco saludables.
- Mejora de la digestión: El té blanco puede mejorar la digestión y el metabolismo de los carbohidratos y las grasas, lo que optimiza la utilización de nutrientes y puede contribuir a un mejor control del peso.
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- Beber de 2 a 3 tazas al día: Incluir varias tazas de té blanco en tu rutina diaria puede proporcionar los beneficios mencionados sin provocar una ingesta excesiva de cafeína.
- Sustituto de bebidas calóricas: Utiliza el té blanco como una alternativa saludable a las bebidas azucaradas o altas en calorías, como refrescos, jugos artificiales y bebidas energéticas.
- Ingerir en momentos estratégicos: Beber una taza de té blanco antes de las comidas puede ayudar a controlar el apetito y disminuir la ingesta calórica durante la comida.
- Combinación con otros hábitos saludables: Para maximizar los beneficios del té blanco, es importante combinar su consumo con una dieta equilibrada, rica en frutas, verduras, proteínas magras y granos integrales, así como con la práctica regular de ejercicio físico.
- Preparación adecuada: Evita añadir azúcar o edulcorantes artificiales al té blanco, ya que pueden contrarrestar los beneficios para la pérdida de peso. Si necesitas endulzar el té, opta por una pequeña cantidad de miel o stevia.
Cómo incorporar el té blanco en tu rutina para bajar de peso:
Cómo preparar té blanco:
- Cantidad de té: Usa aproximadamente una cucharadita de té blanco por cada taza (240 ml) de agua.
- Temperatura del agua: Calienta el agua hasta alcanzar una temperatura de entre 75°C y 85°C. No uses agua hirviendo, ya que puede dañar los delicados compuestos del té.
- Tiempo de infusión: Deja reposar el té en agua caliente durante 2 a 5 minutos, según tu preferencia de sabor.
- Servir y disfrutar: Cuela las hojas y sirve el té caliente. Puedes disfrutarlo directamente o añadir un poco de miel o limón si lo prefieres.
El té blanco es una opción saludable y refrescante para quienes buscan disfrutar de los múltiples beneficios del té en su forma más natural y menos procesada.
