Afirmó que su gobierno logró frenar el flujo del 96% de las drogas por la vía marítima y ahora va por tierra.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, advirtió que su gobierno “iniciará” ataques terrestres contra el narcotráfico en América Latina, lo que representaría una escalada significativa de la estrategia estadounidense contra el tráfico de drogas en la región.
Desde la Oficina Oval de la Casa Blanca, Trump afirmó que Washington ya logró frenar 96% de las drogas que ingresaban por vía marítima, por lo que ahora el foco de su ofensiva se trasladará a tierra.
“Ahora estamos empezando por tierra, y por tierra es mucho más fácil, y eso va a empezar a suceder”, declaró ante periodistas, aunque evitó precisar cuándo y dónde se llevarían a cabo las acciones.En los últimos días, el Pentágono ha lanzado una serie de ataques contra embarcaciones que, según Washington, estaban vinculadas al tráfico de drogas en aguas internacionales en el Mar Caribe.
Venezuela, en la mira
Aunque la postura del mandatario ha sido interpretada como una presión directa contra el gobierno de Venezuela, Trump aclaró que los ataques terrestres no se limitarían necesariamente a ese país.
“No necesariamente tiene que ser en Venezuela. Las personas que traen drogas a nuestro país son objetivos”, sostuvo.
El presidente estadounidense ha defendido esta estrategia al equiparar el combate al narcotráfico con una operación de guerra. Incluso aseguró que, si las muertes por sobredosis se contabilizaran como bajas en combate, Estados Unidos enfrentaría “una guerra sin precedentes”.
Ante la posibilidad de una agresión directa, presidentes de Latinoamérica han respondido a los amagos de Donald Trump.
El presidente venezolano Nicolás Maduro advirtió que si Venezuela fuera atacada por una potencia extranjera, la clase trabajadora debería impulsar una “huelga insurreccional general” y profundizar una “revolución aún más radical”.
¿Y contra México?
No obstante, la advertencia del republicano también ha involucrado a México, su principal socio comercial, por lo que este amago podría tener repercusiones políticas y diplomáticas de alto impacto en la región.
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, respondió en recientes días sobre la postura de Donald Trump, en donde reiteró que en México hay colaboración con Estados Unidos, pero nunca aceptará que exista una intervención extranjera en el país.
“Eso no se va a dar porque no es necesario, primero. Segundo, porque somos un país soberano y nunca aceptaríamos una intervención extranjera y tercero porque ya tenemos un entendimiento con Estados Unidos en materia de seguridad”, dijo.
información de. políticomx
