Ingredientes (para 6 personas)
No te asustes, porque todo lo que vas a necesitar se puede encontrar en un supermercado común:
- Un seitán entero, que harás siguiendo esta receta.Recuerda fijarte en todos los ingredientes que vas a necesitar. (Importante conservar el agua dónde lo cociste)
- 3 cebollitas pequeñas y 2 cebollas medianas
- 2 ajos
- 1 ajo puerro
- 4 cucharadas soperas de guisantes
- 1 puñado de ciruelas pasas sin hueso
- 3 puñados de champiñones en láminas
- Caldo vegetal (puede ser en pastilla, pero ojo con el glutamato y la gran cantidad de sal que suelen llevar)
- 10 patatas medianas
- Medio vaso de vino blanco (atención a esta lista de vinos blancos veganos)
- 2 cucharones de agua dónde cociste el seitán
- Un pimiento rojo grande y otro pequeño
- Un pimiento amarillo pequeño
- 1 zanahoria
- Albahaca
- Pimienta negra
- Aceite de oliva
Necesitaremos horno y una gran fuente apta para horno.
Método
- Estos pasos se harán después mientras estemos preparando el Seitán (mientras lo dejamos que se cueza en la olla). Seguiremos esta receta hasta el paso número 9, dónde dejamos secar el seitán durante 10 minutos. Te aconsejo que el seitán que prepares para el día de navidad no sea el primer seitán que hayas preparado (¡ Y más si tienes invitad@s!) , porque pese a que no es nada difícil, tienes que cogerle el truco para que te quede perfecto.
- Mientras, vamos a preparar otra olla de tamaño mediano-grande para poner a cocer nuestras patatas, partidas por la mitad. Las retiraremos cuando estén bien cocidas, es decir, cuando puedas atravesarlas con un tenedor muy fácilmente.
- Ahora vamos a preparar la salsa que acompañará nuestro seitán relleno. Para ello, en una sartén con un chorrito de aceite y a fuego medio, vamos a sofreír ligeramente 1 pimiento rojo picado, 2 cebollitas pequeñas partidas por la mitad, 2 ajos, 3/4 de ajo puerro, 1 puñado de ciruelas pasas sin hueso, 4 cucharadas de guisantes, 1 puñado de champiñones en láminas y 1 zanahoria en rodajas. Acuérdate de remover constantemente para que no se te pegue. No lo dejes demasiado tiempo en la sartén, ten en cuenta que solo tiene que coger algo de color porque luego irá un buen rato al horno.
- Cuando ya tengamos nuestro sofrito de la salsa, vamos a dejarlo reposar en la fuente y vamos a seguir preparando la receta.
- Recuerda ir controlando el seitán, no debería pasar los 40 minutos de tiempo en cocción, y tendrás que dejarlo un mínimo de 10 minutos secando cuando lo retires del agua.
- Ahora toca preparar el relleno: para ello vamos a sofreír ligeramente 3/4 de pimiento amarillo pequeño, 3/4 de pimiento rojo pequeño, el resto de los champiñones, 2 cebollas medianas y un trocito de unos 4 cm de ajo puerro. Todo esto tiene que ir muy muy picadito. Déjalo un momento en la sartén sin calentar, continúa con el siguiente paso.
- Cuando ya tengas el seitán seco y templado (para que puedas manejarlo bien) vamos a cortar uno de los costados y vamos a empezar a hacer un agujero en el centro, respetando lo máximo posible la parte externa del seitán. No hagas el agujero demasiado ancho, porque sinó se te puede deshacer el seitán. A mi me ha ido muy bien hacer el corte interno con un cuchillo muy largo y fino (muy a mi pesar, comúnmente llamado cuchillo jamonero 🙁 , pero que lo tengo porque va muy bien en estos casos).
- Cuando ya hayas sacado todo el interior del seitán, pícalo bien y mezclalo con los ingredientes que tienes picados esperando en la sartén. Ahora sí, sofríelo ligeramente, hasta que esté doradito, pero sin pasarte. Recuerda nuevamente que esto estará dentro del horno durante media hora.
- Pon a precalentar el horno a unos 170 grados.
- Ahora, rellena bien el interior del seitán con la ayuda de una cuchara, empujando bien hacia adentro para que no queden huecos. Si te sobra relleno, ponlo en la fuente para horno.
- Ya con el seitán relleno, lo colocamos en la bandeja para horno. Colocamos también las patatas a su alrededor y bañamos todo con medio vaso de vino blanco, un chorrito de aceite de oliva, dos cucharones de caldo del seitán y un chorro de caldo vegetal (si usas pastillas, simplemente espolvoréalo en la base y juntalo con los cucharones de caldo de seitán).
- Coloca la bandeja a media altura en el horno, encima de la rejilla, y con el horno encendido por encima y por abajo, a 170 grados con ventilador. Lo tendremos que dejar una media hora aproximadamente. Recuerda que este tiempo es orientativo, y que siempre tienes que ir fijándote periódicamente en su seitán.
- Mi consejo es que vayas dándole la vuelta al seitán cada 10 minutos apróx, para que se haga bien por todos los costados. También te aconsejo que cuando le vayas a dar la vuelta, aproveches y lo rehidrates con la ayuda de una cuchara y el caldo que está en la propia bandeja.
- Cuando ya esté dorado por todos sus costados, retíralo del horno y córtalo en rodajas finas o gruesas, según te guste más. Una buena opción es triturar parcialmente la salsa con la batidora de mano. Si ves que queda muy espesa, puedes utilizar un poco más del caldo resultante de preparar el seitán.
- Mi consejo es que, para cortarlo, utilices un cuchillo bien afilado, sinó se te complicará mucho la tarea. Además, puedes ayudarte con una espátula para que el relleno no se caiga. Te aconsejo que lo sirvas caliente y con un chorrito de aciete de oliva y algo de pimienta negra y herbamare o sal por encima. ¡Fascinará a todo el mundo, créeme!