
Prácticamente al unísono de las felicitaciones de la Presidente Claudia Sheinbaum a las fuerzas militares, la guardia Nacional y al secretario de seguridad Garcia Harfuch se daba a conocer la noticia de otra terrible masacre en Sinaloa.
Cuerpos colgando de puentes, cabezas humanas tiradas en bulevares, extremidades desmembradas en bolsas plásticas y una camioneta con mas de 18 cadáveres todos con muestras de tortura e impactos de bala.
En palabras coloquiales podemos decir que las felicitaciones dadas por Presidente sonaron mas como una mentada de madre o una burla para el pueblo de México.
Como poder otorgar gracias y felicitaciones cuando queda clara la inutilidad al igual que la complicidad de las fuerzas castrenses y policiales de México.
Lo que debería de hacer es correrlos o de menos darles una llamada de atención publica.
Es vergonzoso que pese a que México se continua tiñendo en sangre con la violencia en aumento y la presidente sigue temerosa, sumisa e incapaz de reconocer que la política implementada por su patrón López obrador no ha servido de nada, con su tibieza demuestra que solo es un títere incapaz de actuar o gobernar por si misma, que solo es una interlocutora o herramienta para que obrador siga disponiendo del país como le da la gana.