
Si contestas una llamada que se cuelga sola, probablemente fuiste parte de un sistema automático que prueba qué números están disponibles.
En la actualidad, cada vez es más común recibir llamadas telefónicas que se interrumpen apenas contestas. Muchas veces ni siquiera hay una voz del otro lado. Esta práctica no es casual ni un error: se trata del robocalling, una técnica automatizada que utilizan tanto empresas como ciberdelincuentes para distintos fines.
El robocalling funciona mediante sistemas informáticos que realizan llamadas automáticas a miles de números de teléfono. La llamada solo sirve para identificar si alguien responde.
En caso afirmativo, el sistema registra que el número está activo. A partir de ahí, pueden ocurrir distintas cosas: la llamada se corta sin más, se transfiere a un agente humano o se reproduce un mensaje grabado.
¿Para qué se usa el robocalling?
Aunque no lo parezca, esta técnica tiene décadas de antigüedad. En sus inicios, servía para confirmar qué líneas telefónicas estaban activas. Hoy se utiliza para publicidad telefónica, encuestas, recordatorios médicos, campañas políticas e incluso estafas.
Uno de sus usos más comunes es el comercial: una vez que la máquina detecta que alguien contesta, conecta la llamada con un operador humano que intenta venderte algo. Esta automatización permite ahorrar tiempo a los agentes, ya que no tienen que marcar ni esperar que alguien atienda.
Otra modalidad es la difusión de mensajes pregrabados, que pueden ir desde ofertas de productos hasta campañas políticas o, en el peor de los casos, intentos de fraude. En estos últimos, los mensajes suelen pedir información personal como contraseñas, datos bancarios o códigos de verificación.
¿Y si solo se cuelga?
Muchas veces, el robocalling no busca hablar contigo, sino solo confirmar que tu número está activo. Si contestas, ese dato puede almacenarse para vender bases de datos o usarse más adelante en campañas masivas. Por eso, si respondes una llamada y no hay nadie al otro lado, no es buena señal.
Además, si bloqueas el número, eso no garantiza que dejen de llamarte. Los sistemas de robocalling utilizan números distintos en cada intento, por lo que evitar estas llamadas requiere otras estrategias.
¿El robocalling es ilegal?
El uso de llamadas automatizadas no es ilegal por sí solo. Muchas instituciones las usan de manera legítima para notificaciones, encuestas o recordatorios. El problema surge cuando se usan sin consentimiento o con fines engañosos.
La legislación de varios países latinoamericanos exige que las empresas cuenten con autorización del usuario para contactarlo por teléfono. Sin embargo, no todas cumplen. Además, algunas operan desde el extranjero, donde las regulaciones locales no tienen alcance.
Cómo protegerte del robocalling
Una de las recomendaciones más eficaces para reducir este tipo de llamadas es inscribirse en registros como la Lista Robinson, que existen en varios países. Estos registros permiten revocar el permiso para recibir llamadas comerciales. Las empresas serias están obligadas a consultarlos antes de realizar campañas telefónicas.
También es útil activar herramientas de bloqueo de llamadas que muchos smartphones ya traen integradas. En sistemas operativos como iOS o Android, se pueden silenciar llamadas de números desconocidos, identificar spam o bloquear automáticamente ciertos números. Además, hay apps especializadas que pueden ayudarte con este filtro.