Todo parece indicar que las autoridades federales comandadas por la 4t están operando en contubernio con la empresa para perjudicar a los trabajadores sindicalizados y trastocar sus derechos laborales. 

Lo anterior es dado a conocer bajo la solicitud de anonimato toda ves que temen represalias. 

Es extraño que justo después de estallar la huelga comiencen a salir investigaciones, denuncias anónimas y ataques en contra de los lideres sindicales acusándoles de presuntos delitos, afirman que ya es claro un contuvieron orquestado desde las cúpulas de poder para favorecer a la empresa y dejar sin efecto o catalogar como improcedente una huelga sustentada en derecho y apegada a la ley con razones de sobra para ser procedente. 

Por otra parte también resulta extraño que las autoridades no investiguen las denuncia publicas en contra de quienes manejan financieramente la institución, sueldos millonarios, prestaciones exageradas, contratos obscuros sin licitación para realización de trabajos no necesarios y lo principal ocultar el destino o utilidad de cientos de toneladas de oro que mes con mes concentran y de los cuales se desconoce su destino. 

Lo que de inicio fue un asunto meramente laboral hoy se puede tornar en un problema social y político pues las autoridades federales no tienen por que ingerir en favor de ninguna de las partes, su función principal debería ser velar por los consumidores afectados a quienes indebidamente se les siguen cobrando intereses sin que puedan recuperar sus prendas.