Teziutlán, Puebla.- Por irse a dormir un momento sin antes haber apagado los quemadores de su estufa en donde se cocinaban unos frijoles, un septuagenario falleció intoxicado al interior de su domicilio en el barrio de Ixticpan, municipio de Teziutlán, mientras que su nieta de 11 años logró ser rescatada y fue llevada a recibir atención médica por la inhalación de monóxido de carbono.
El incidente que ocurrió el pasado fin de semana, fue reportado a elementos de Protección Civil Municipal por una persona que fue a visitar al hoy fallecido, el cual respondía en vida al nombre de Raúl Miramontes, de 70 años de edad. El hombre explicó que el anciano no respondió cuando toco el timbre de la casa, además, dijo que de su vivienda emanaba un fuerte olor a quemado.
Los cuerpos de emergencia acudieron al domicilio en cuestión, tras ingresar, descubrieron que los quemadores de la estufa estaban encendidos pues aparentemente se estaban cocinando frijoles dentro de una olla, lo que derivó que el interior de la casa se saturara de monóxido de carbono.
Los rescatistas localizaron además el cuerpo de un hombre adulto, el cual estaba recostado en su cama, por lo que dedujeron que se fue a dormir mientras esperaba que el alimento estuviera listo, sin embargo, quedó inconsciente y posteriormente perdió la vida tras inhalar los gases tóxicos.
Junto al septuagenario se encontraba su nieta, Alicia, de aproximadamente 11 años de edad, quien a pesar de la intoxicación aún contaba con signos vitales, por lo que los paramédicos de inmediato le brindaron los primeros auxilios y le colocaron un respirador con oxígeno para posteriormente trasladarla en una ambulancia al Hospital Regional para que recibiera atención médica urgente.
Durante las diligencias del levantamiento del cadáver, el personal Ministerial corroboró que todo se debió a que en la estufa dejaron encendida una olla con frijoles. El agua que contenía se evaporó y los frijoles se quemaron. Por ello el anciano murió por intoxicación de monóxido de carbono.
