Algo que vale la pena contar: El hombre es un animal que estafa.

24 abril 2015
Visto: 1436 veces

boardman«El hombre es un animal que estafa, y no hay otro animal que estafe fuera del hombre.» Poe.

La corrupción es un mal tan antiguo como las relaciones entre los hombres. Hubo funcionarios en la época de los faraones que se asociaban con profanadores de tumbas, antiguos griegos que inflaban montos en la construcción de partenones y romanos que cultivaban redes clientelares para el pago de favores. Sin embargo las noticias de sus fechorías caminaban entre murmullos y despacito.

Mientras el vínculo social se encuentre sujeto al intercambio monetario, la corrupción será una constante.

Claro, hay sus variaciones. En los gobiernos aristocráticos, (como decía Alexis de Tocqueville) los hombres que acceden a los asuntos públicos son ricos y sólo anhelan el poder. Por otro lado, en las democracias, generalmente quienes pretenden ejercer el servicio público no son acaudalados y frecuentemente buscan tan sólo riqueza. Una pequeña imperfección del sistema de gobierno del pueblo y para el pueblo.

Lo cierto es que en la actualidad la noticia dejó de caminar y corre; dejó de ser cuchicheo y se transformó en grito (literalmente) a los cuatro vientos.

Incluso hasta las frases clásicas y su filosofía podrían evolucionar, como de: “No hay quien aguante un cañonazo de mil pesos” a “Difícilmente alguien aguanta un cañonazo de mil retweets”. Las herramientas tecnológicas y de comunicación social, han dado un renovado empuje a la cultura de la denuncia y el escarnio público. Pero ojo, un dato interesante es que esta nueva forma de participación no solo involucra a funcionarios, sino a cualquiera que se vea involucrado en un acto reprochable. Cada paso en el mundo público e incluso privado, es fiscalizado por cualquiera con un teléfono inteligente y conexión a la red.

Escrito por: Alberto Boardman

[email protected]

Twitter @AlBoardman 

Respuesta a Algo que vale la pena contar: El hombre es un animal que estafa.

  1. me gusta, simple péro profundo.

  2. Pingback: yo

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *