Después de cinco días de confrontación entre Carmen Aristegui y la dirección de MVS Comunicaciones, la empresa decidió romper la relación laboral con la periodista, pues “como empresa no podemos aceptar condicionamientos y ultimatos de nuestros colaboradores”.
El problema se generó a partir de la presentación de la plataforma para filtraciones México Leaks, el pasado 10 de marzo, iniciativa a la que se sumó el equipo de Aristegui Flores, pero que involucró a MVS, lo que molestó a la empresa pues usaron la marca sin autorización.
La compañía difundió spots en los que rechazaba formar parte del proyecto y dejaba claro que el “uso de nuestra marca, sin autorización expresa de sus propietarios, constituye no solo un agravio y una ofensa, sino un engaño a la sociedad, pues implica un muy lamentable abuso de confianza”.
Aristegui señaló que le sorprendía la postura de la MVS, pues lo que habían dicho durante el lanzamiento fue que la Primera Emisión de esa casa de medios, a través de la Unidad de Investigaciones Especiales, se unía a México Leaks.
MVS le dio la bienvenida a México Leaks, “como a cualquier otra plataforma ciudadana”, pero volvió a expresar su descontento y estimó inaceptable “que algunos de nuestros colaboradores comprometan y dispongan de recursos y marcas de la empresa para realizar alianzas sin conocimiento y autorización de la administración”.
Aunque parecía un problema de “comunicación”, la empresa estimó que se había incluido en una alianza con otros medios sin permiso, por lo que “lamentamos y condenamos el uso de nuestra marca Noticias MVS” y afirmó que tomaría medidas pertinentes.
La decisión fue despedir al coordinador de la Unidad de Investigación, Daniel Lizárraga, y al reportero Irving Huerta “por abuso de confianza”, lo que derivó en la petición de Aristegui Flores para que fueran reinstalados, pues su salida afectaba al equipo y a las investigaciones en curso.
La empresa respondió con una serie de lineamientos para sus conductores y colaboradores, que rigen a partir del lunes 16 de marzo y que ponían a consideración de Luis Cárdenas, Ezra Shabot, Alejandro Cacho y la propia Carmen Aristegui, con la opción de firmar en caso de estar de acuerdo.
Ante el panorama, ciudadanos “colgaron” una petición en el portal Change.org, bajo los hashtags #CarmenSeQueda y #EnDefensaDeAristegui, para exigir a MVS mantener en su puesto a la comunicadora, superando la meta fijada de 100 mil firmas.
Finalmente, este domingo por la noche, la compañía determinó dar por concluido el contrato con Carmen Aristegui. Previamente, el Ombudsman de MVS, Gabriel Sosa Plata, pidió a las partes llegar a un acuerdo, pero agregó que la empresa se había excedido en la forma de protestar.
Este lunes, la comunicadora y su equipo se apostaron afuera de MVS Radio donde sólo se les dejó entrar por sus pertenencias. Aristegui Flores afirmó que emprendería una “batalla” junto con sus abogados, pues hay un ”atropello a la libertad de expresión”.
Comentó que la decisión tomada por la noche, “tiene todos los visos de haber sido planeado con mucha anticipación, con muchos recursos y con mucho poder, y vamos a analizar la mejor manera de dar la batalla, pero la daremos”.
LOS OTROS DESPIDOS DE CARMEN ARISTEGUI
Grupo Imagen: en 2002, Carmen Aristegui y Javier Solórzano fueros despedidos de esta empresa. El conflicto derivó luego de que Aristegui Flores expresará al aire desacuerdos con la línea que llevaba la empresa, que dirigía editorialmente Pedro Ferriz de Con, quien no dejó entrar a la comunicadora entrar a la cabina y cumplir con el espacio informativo que encabezaba. De Con asumió el noticiario en el lugar de Aristegui, mientras que Ciro di Constanzo quedó en el espacio de Solórzano. Éste último afirmó que Ferriz de Con intimidó y amenazó a Carmen para acabar con el conflicto que incluyó ceder su acciones a cambio de una indemnización.
Circulo Rojo: en 2002, este programa televisivo llegó a su fin por problemas comerciales más que de censura. Este serial se especializaba en presentar investigaciones de la talla de los abusos por parte del padre Maciel. Circulo Rojo era coproducido por Televisa y Grupo Imagen, pero las diferencias entre la pareja formada por Carmen Aristegui y Javier Solórzano, y Pedro Ferriz de Con, de la segunda cadenas, complicaron las negociaciones para mantener el proyecto. Raúl Trejo Delarbre afirmó que ante las tensiones, quisieron dejar Grupo Imagen e irse a Televisa, pero los contratos tenían una cláusula de rescisión muy alta. Al final, el programa terminó y tanto Aristegui como Solórzano dejaron de trabajar junto a Ferriz de Con.
W Radio: Aristegui era titular del espacio matutino Hoy por Hoy en esta compañía copropiedad de Televisa y del consorcio español Grupo Editorial Prisa. El 4 de febrero de 2008, la empresa decidió no renovarle el contrato, un mes antes de que automáticamente se renovara. Carmen afirmó que aunque hubo negociaciones, la línea editorial de su programa era incompatible con la de los dueños de la estación. Por su parte, Daniel Moreno, en ese entonces director de W Radio, detalló en su momento que se había acusado a la empresa de querer dictarle línea a Aristegui, pero que se debió más a lineamientos que la conductora no quiso aceptar, como respetar cortes comerciales, buscar equilibrio informativo o hablar sobre la presentación del noticiario.
Noticias MVS: en 2011, MVS decidió rescindir el contrato con Carmen Aristegui por haber “transgredido el código de ética”, al hablar sobre el supuesto alcoholismo del entonces presidente Felipe Calderón, tras una manta colocada en la Cámara de Diputados por el petisa Gerardo Fernández Noroña. La periodista pidió a Presidencia diera una respuesta sobre el tema, de un problema que afectaría las decisiones del panista como funcionario público. MVS tomó la decisión de despedirla y rechazaba “la presentación y difusión de rumores como noticias”.
Luego de movilizaciones de apoyo, la empresa reculó y decidió recontratar a Aristegui Flores y se creó la figura del Ombudsman de MVS, con el objetivo de proteger el derecho a la información de las audiencias y la libertad de expresión de los periodistas y las empresas, y hacer crítica a la labor periodística, además de dar observaciones y soluciones a favor del público. Sin embargo, el hecho no sólo quedó en la disputa entre empleado y dueño, sino que trascendió a las esferas del gobierno.
En su momento, Joaquín Vargas, accionista mayoritario, reveló que había tenido presiones por parte del entonces secretario del Trabajo, Javier Lozano, para recontratar a Aristegui. De hacerlo, se complicaría el proyecto para explotar y mantener la banda 2.5Ghz. Alejandra Sota, ex vocera presidencial, afirmó que el gobierno sólo emitió un “extrañamiento” por el rumor y no la cabeza de la periodista, como afirmó el empresario. Expresó que todo se trataba de una “cortina de humo” de Vargas porque su proyecto tenía muchas deficiencias.
