
Rafa Nadal no ha tenido un final feliz en el primer torneo de tierra batida de la temporada. El español cayó eliminado ante el italiano Fognini en semifinales en Río de Janeiro y lo hizo, además, con una desagradable discusión con el juez de silla. El brasileño Carlos Bernardes sacó de quicio al de Manacor. No es la primera vez. Sus discusiones en los últimos años han sido más que frecuentes. De hecho, en esta última, Nadal amenazó al árbitro con pedir a la ATP que no vuelva a ser el encargado de repartir justicia en ningún partido que él dispute.
En esta ocasión, en este partido, Nadal explotó por que Bernardes le indicó un ‘warning’, esto es, una advertencia, por perder tiempo a la hora de realizar un saque, uno de los estereotipos que persigue a Rafa, pero que en esta ocasión, sí que tenía motivo de ser.
«¿Cómo quieres que saque con la mano (izquierda) así? Te voy a decir una cosa. Te voy a decir una cosa. Y te la digo muy en serio. Voy a pedir que no me vuelvas a arbitrar nunca más. No tengo nada contra ti, pero no puedo más contigo. Eres el juez de todo el circuito que más me presiona con estas cosas», le recriminó en pleno partido y a voz en grito en una actitud poco frecuente en Nadal… salvo cuando se ve las caras con Bernardes.
Esta bronca fue intensa, pero más todavía la que protagonizaron en 2010, en la Copa de Maestros de Londres, cuando Nadal amenazó con irse de la pista por un error de Bernardes tras solicitar un ‘ojo de halcón’.
«¡¡Lo que estás diciendo es una barbaridad, Carlos, una barbaridad!!», gritó antes de volver a jugar, eso sí, con un monumental enfado.
Entre una y otra ocasión, Nadal tuvo otro encontronazo con Bernardes en el Open de Australia por una acción similar, cuando Nadal continuó jugando una bola sobre la que quería reclamar