De inicio la políticas educativas encaminadas a eliminar becas a los alumnos con alto desempeño académico disminuyen el valor al esfuerzo que un estudiante podría recibir como gratificación a su empeño y esfuerzo, ahora destacar o esforzarse no tiene reconocimiento, los absurdos argumentos se sustentan en que premiar el esfuerzo resulta discriminatorio para quienes prefieren ser mediocres.
La disposición oficial que también alienta la mediocridad impidiendo que alumnos de bajo desempeño puedan ser reprobados pos su falta de aprendizaje o aprovechamiento en igual manera abona al demerito de la educación, si agregamos que además el copiar durante los examines ahora es permitido podemos imaginar que la educación para el nuevo Gobierno no resulta más que mero trámite.
Ahora con la creación de 100 universidades patito el lograr obtener una educación superior resultara poco meritorio, la política universitaria es de por sí ya precaria ahora impone la obligación al Estado a brindar educación superior y para ello el Presidente López Obrador se da a la tarea de crear Universidades de modo exprés, sin edificio s adecuados, sin planes de estudio diseñados correctamente, con profesores sin capacidad pedagógica o experiencia en la docencia incluso sin la acreditación adecuada ante la propia Secretaria de Educación ( sin duda las acreditaran al vapor y por mandato Presidencial ) , el incentivo para lograr la inscripción al igual que las metas planteadas será otorgar una beca de $ 2400.00, la intención es lograr que 300 mil jóvenes egresen de dicha universidades y con ello vender cifras históricas aun cuando la educación sea deficiente, el recurso del erario que se destina a las Universidades para el Bien Estar Benito Juárez suma los Mil millones de pesos, algo muy semejante a la operación de los centros educativos creados para abatir las cifras de analfabetismo en los institutos de educación para los adultos donde para alcanzar las metas incluso se otorgaban guías o exámenes ya contestados a fin de que acreditaran la primaria.
Cualquier local con cuatro paredes, un techo y gente interesada en obtener la beca de $ 2800.00 podrá convertirse con toda celeridad en una universidad de la cual egresen profesionistas titulados y listos para competir en el mercado laboral, Universidades que más que perseguir una política educativa buscan una política social, sin docentes profesionales, sin planes de estudio los resultandos serán un espejismo digno de la peor demagogia oficial.
El problema de fondo es que dicho experimento comenzó con Universidades creadas por el Partido del Presidente, Morena tiene ya 9 supuestas universidades donde incluso se imparte la carrera de Medicina y ahora el mismo sistema que antes se financiaba desde el partido ahora se implementa con recursos directos del erario, pese a que el programa no se encuentra abalado por ningún organismo internacional pero ello pareciera no importarle al Gobierno Federal.
Cientos de miles de familias han realizado enormes esfuerzos para lograr la educación de sus hijos en busca de proveerles un mejor futuro, muchos estudiantes han realizado enormes sacrificios por estar preparados y sacar el mejor provecho a su enseñanza pero ahora por desgracia parece que ello no significara nada, la preparación universitaria se obtendrá casi por decreto, México podría contar con millones de titulados en todas las especialidades y además se les pagara por ello, la competencia laboral será de cierta forma desleal, la oferta se incrementara y ello repercutirá sin duda en las expectativas de ingresos.
Pronto en México tener un título universitario estará demeritado, el valor de la preparación académica perderá significado, el tener una excelencia académica no será tomado para nada en cuenta e incluso esforzarte para ser un buen alumno podría generarte que te califiquen como herramienta para la discriminación.
Si bien debemos ser entusiastas de la equidad en la posibilidad de las oportunidades ello no significa favorecer la mediocridad o fomentar la falta de esfuerzo, otorgar títulos universitarios por decreto podrá disfrazar las cifras de referencia pero ello no significara una adecuada educación ni los niveles de preparación adecuada para que la calidad de vida e ingresos mejoren.
