1. Recuerda y disfruta (nuevamente) tu día

Es el hábito que me ayuda a tener un estado mental positivo todos los días. Antes de irte a la cama, tómate el tiempo para analizar tu día del principio hasta el fin.¿Has tenido algo bueno? ¿Has estado orgulloso de ti mismo? Si haces cosas buenas en el día, aprovéchalas para impregnarte conscientemente. Además de capacitarte para ver algo positivo a tu alrededor, aumentarás tu autoestima. Disfruta de lo que has hecho, disfruta de los pequeños momentos pasados con las personas que amas: has ayudado a un colega, has logrado algo…Un simple gesto es suficiente.

2. Respira cuando estás estresada

La respiración es un activo que todas tenemos. ¡Respira adecuadamente todos los días y te ofrecerá enormes beneficios! Entre otras cosas, esto permite reducir el estrés cotidiano y afrontar mejor los días difíciles.

Cuando empieces a sentirte estresada, ansiosa o incluso irritada, tómate 2 minutos, siéntate, cierre los ojos y respira. Coloca tus manos sobre tu vientre y respira profundamente con tu nariz, centrándote en tu respiración.  Sea lenta en tus inspiraciones y expiraciones.

Te sorprenderá el hecho de que estarás más tranquila y en mejor forma después de hacer este pequeño ejercicio. Incluso cuando todo está bien, haz este ejercicio.

3. Vive en el momento presente

La sociedad nos impone un ritmo de vida muy rápido. Olvidamos nuestra propia existencia y nuestro propio ser. Ya no estás enfocada en ti, sino en tu entorno externo. Ya no estás realmente en el control de tu vida ya que ya no puedes escuchar tu cuerpo y tomas el tiempo para apreciar el momento presente. 5 minutos al día, toma conciencia del momento presente, (sí, es un poco extraño, déjame explicarte).
Toma conciencia del momento presente es, de una manera cuidadosa:

– Observa más de cerca lo que sucede a tu alrededor,

– Escucha lo que sucede a tu alrededor: pájaros, automóviles, personas…,

– Siente el sol asentarse sobre ti y siente su calor a través de tu ropa y tu piel,

– Siente el viento deslizarse en tu cara. Simplemente estás abriendo tus sentidos y siendo el corazón de la acción.

Relajar tu cuerpo y tu mente es algo bueno. Haciendo este ejercicio de forma regular, llegarás de manera gradual a administrar mejor tus emociones.

4. Acepta tu situación

Uno de los grandes secretos para ser feliz y exitosa es aceptar dónde estás en la vida y aprovecharla al máximo. Todavía no sabes a dónde vas, pero mientras continúes avanzando, el viaje será gratificante. Paso a paso, un pie delante del otro, el tiempo tiene una forma de mostrarte gradualmente el camino hacia lo que realmente importa. A veces te encuentras en el medio de la nada y, a veces, en el medio de la nada te encontrarás.

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5. Lee frases positivas

Cómo lo expliqué en el artículo sobre los pensamientos, nuestro celebro crea su verdad. Entonces mejor tener una verdad positiva. Por eso tengo una técnica muy eficaz.

1. La primera etapa es escribir unas 20 frases positivas en lo que quieres ver el cambio más positivo.

Puede ser por ejemplo: me siento más linda cada día, atraigo relaciones positivas, me siento bien en mi cuerpo y mi mente, mi vida es entretenida, tengo todo lo que necesito, estoy en el camino de realizar mis sueños…
2. La segunda etapa es colocar estas frases al lado de tu cama.

3. La tercera etapa es leerlas. Léelas en voz alta o en tu cabeza. Tienes que leerlas siempre que tienes vista en ellas.

De verdad te va a cambiar tu vida en cosas que nunca pensaste cambiar.

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6. Ten gratitud, encuentra la suerte en todo momento

A veces las cosas salen exactamente como lo deseaba y luego hay otros momentos en los que nada funciona según lo planeado… Y si en lugar de quejarse y de ver cosas que están mal en tu vida, haces lo opuesto?

Mira qué suerte tienes, date cuenta de todo lo que has hecho hasta ahora, piensa en tus pequeñas victorias, mira cómo algunas personas apreciarían estar en tu lugar incluso si no te gusta tu vida. Y, sobre todo, recuerda que tus derrotas brindan sabiduría, fortaleza y determinación.

En este momento, estás exactamente donde se supone que debes estar y estoy segura de que algunas personas apreciarían estar en tus zapatos. Todos los días, se agradecida por cada pequeña cosa que tienes, que vives todos los días, las personas a las que asiste, etc. Por ejemplo, puede ser tener  padres geniales, tener un gran trabajo, conocer gente buena, mejorar un punto en su vida, etc. Es imposible que no encuentres algo. ¡Estoy convencida de que tu vida es muy rica!

7. Sonríe

Lo repito y continuaré repitiéndolo: ¡sonría!. Demasiadas personas permanecen neutrales a diario.Ilumina tu rostro, ilumina tu día, ilumina a la persona con la que estás hablando. Demasiadas personas descuidan el poder de una sonrisa. Hazlo un hábito diario. En cada nueva reunión, una sonrisa. Cada vez que compre tu pan, una sonrisa al cajero, etc. No faltan oportunidades y mejorará tu vida consistentemente solo con este pequeño hábito