En los últimos días el tema de la gasolina ha estado en boca de todos, si bien el saqueo de combustible al igual que los excesos dentro de Pemex son alarmantes poco se ha dicho de lo que sucede o sucedía en la CFE donde los actos de corrupción son más graves, durante décadas los Sindicatos al igual que sus agremiados contaban dentro de sus prestaciones con energía gratuita, empleados abusivos y corruptos abusaron de dicho beneficio, compartir electricidad con vecinos y familiares, reemplazaban todos sus aparatos por utensilios eléctricos, vendían cable e insumos, dedicaban sus horas laborales para realizar trabajos privados, realizan conexiones piratas, auxiliaban en la instalación de artilugios en medidores entre otros muchos actos de corrupción.

Mientras en los niveles bajos se practicaba el robo hormiga y otras prácticas en los escalafones más altos la corrupción resulta aun peor, adquisición de materiales a altos costos, colocaciones de personal, venta de plazas, tendidos completos para dotar de electricidad a fincas privadas fue cosa de todos los días.

En el tema del Carbón el escándalo es aún mayor, la venta de concesiones, la promoción del Coyotaje, las transas realizadas respecto a la calidad del producto, el pago de fletes fantasmas o con sobreprecio produjeron enormes cantidades de dinero para empresarios así como para funcionarios corruptos.

Si es real la lucha que el nuevo gobierno federal pretende entablar en contra de la corrupción sin duda el negocio de la energía eléctrica merece principal atención, en Coahuila existen cientos de personajes que en poco tiempo han acumulado grandes fortunas gracias a los negocios turbios que por años han realizado con la CFE, al igual que la clausura de Gasolineras deben poner atención respecto a los proveedores de Carbón, la venta clandestina de electricidad, las compras, los gastos y las prestaciones excesivas de muchos sindicalizados.