El Puente de Ojuela, en Durango

¿Qué mejor para poner a prueba su amor que un puente de 300 metros de largo a 110 metros del piso? Si tu pareja padece de vértigo, tal vez es mejor que no lo crucen, de lo contrario, es una maravilla de la ingeniería que tienes que pisar mínimo una vez en tu vida. Continúen explorando y adéntrense al pueblo fantasma de Ojuela, no se van a arrepentir.

La Casa Madero, en Coahuila

Si lo que aman es relajarse y disfrutar de un buen vino con un paisaje sin comparación de fondo, este es el lugar indicado. La Casa Madero se jacta de ser la vinícola más antigua de América y definitivamente es una de las más hermosas gracias al Valle de Parras que la hospeda.

El Sótano de las Golondrinas, en San Luis Potosí

Para las parejas aventureras, esta es una experiencia que tienen que vivir. El Sótano de las Golondrinas es el sexto abismo más profundo del mundo y alberga a millares de vencejos y pericos. Ojo a la hora de visitarlo, pues puedes recorrer la orilla y otras atracciones de la Huaxteca Potosina en tour o descender por el abismo, lo cual puede ser mucho más costoso.

La Laguna de los Siete Colores, Quintana Roo

Cualquier persona que haya ido a Bacalar te dirá que es uno de los lugares más hermosos de México. La ventaja es que también es uno de los menos concurridos, por lo que puedes disfrutar de mayor privacidad con tu pareja (guiño, guiño). La laguna, que recibe su nombre por tener todos los azules posibles, será el sitio perfecto para darle rienda suelta al amor.

El Callejón del Beso, en Guanajuato

El clásico de clásicos para ir bien acompañado. Arma la excursión de fin de semana a la ya de por sí romántica Guanajuato y en tu recorrido, pasa por el Callejón del Beso. Cuenta la leyenda que es ahí donde dos amantes compartieron el último beso antes de sucumbir a la muerte.