Impulsa el sistema inmunológico:

Beber jugo de piña ayuda a evitar las infecciones víricas y bacterianas. La bromelina que contiene puede ser una aliada a la hora de aumentar las defensas de nuestro cuerpo. Además, actúa como anticoagulante natural. En cambio, al ser rico en manganeso, éste facilita la producción de enzimas en nuestro organismo.

Mejora la digestión:

La bromelina en este caso es una enzima que ayuda a descomponer y digerir las proteínas. Además, también contribuye a reducir la hinchazón y los dolores. Su consumo es ideal para personas con acidez y dolor estomacal. Su alto contenido en fibra permite también evita el estreñimiento. 

Anti edad natual:

El jugo de piña contiene una alta cantidad de vitamina C y beta-caroteno, antioxidantes que se encargan de combatir los daños causados por el sol y la contaminación en nuestra epidermis. La vitamina C también fomenta la generación colágeno, lo que ayuda a reducir las arrugas y a mejorar la textura y la apariencia general de la piel.

Cuida la salud ocular:

Las dietas ricas en vitamina C contribuyen a no perder vista y pueden reducir el riesgo de formación de cataratas.

Combate problemas respiratorios:

Las personas que consumen nutrientes como el betacaroteno, presentes en la piña, tienen menos riesgo para el desarrollo del asma. También ayuda a combatir la bronquitis y otros problemas respiratorios.