Un juez giro orden de aprensión en contra de Javier Duarte por delitos de delincuencia organizada y operaciones con recursos de procedencia ilícita, la orden para su captura deriva de la utilización de empresas fantasma para la adquisición de diversos bienes muebles e inmuebles.

Fuentes próximas al ex mandatario refieren el acontecimiento como una traición desde las mas altas esferas del poder, se sabe que su separación del  Revolucionario Institucional fue pactada y se le comento que lo anterior solo perseguía intereses partidistas,  posteriormente desde la misma cúpula se le sugirió anticipar su salida en busca de retirar presión al asunto pero advirtiendo de forma velada que tendría la protección federal.

Javier Duarte cayo en el engaño, su renuncia solo sirvió para dejar el fuero y facilitar la expedición de la orden de aprensión; Ahora se presume que el Gobierno de Peña Nieto y el Partido que representa tratara de lavar su ropa sucia con un solo chivo expiatorio, dejando de perseguir asuntos similares como lo son los caso de Coahuila, Nuevo Leon y otros, un solo perseguido para justificar legalidad y otorgar impunidad.

El ex Gobernador presentía la traición, pero no tenia otro camino mas que la confianza, no haber obedecido la orden de los pinos igual les justificaba actuar en su contra.

Otra versión es que desde hace mas de dos meses Duarte se deshizo de todos su bienes, incluso se habla de un retiro bancario de aproximadamente Mil Millones de pesos, todo ante el aviso de lo que estaba por venir, de ser así existió una clara complicidad que permitió se allegara todos los medios para vivir en el exilio cómodamente y que su captura nunca se llegue a realizar.

Si en breve no se actúa contra los responsables en Coahuila que también desviaron recursos mediante empresas fantasmas la teoría del Chivo expiatorio tomara fuerza y será evidente que todo lo que se actúe solo tendrá como finalidad el extender una cortina de humo para simular legalidad.