Ademas de el incremento en los robos, los crímenes violentos y las extorsiones él municipio de torreón mostró su realidad, apenas unas lluvias bastaron para que la ciudad quedara prácticamente paralizada, una pésima infraestructura, obras de mala calidad y un sistema de drenaje obsoleto generaron un caos.

Cientos de calles inundadas provocaron daños en casas habitación, comercios, escuelas y espacios públicos, las calles llenas de baches llenos con agua causaron múltiples accidentes.

En tanto la ciudad es un desastre el Alcalde Miguel Riquelme mantiene inflada la nomina para mantener a una estructura electoral que de poco sirve a la ciudadanía (ola roja) mientras las condiciones de infraestructura y servicios son sumamente deficientes el Municipio gasta millones de pesos mensuales como pago a diversos medios dedicados a ocultar la realidad al igual que para dar falsas muestras de una popularidad y un trabajo irreal.

Resulta totalmente impropio que mientras la ciudad de Torreón sea un desastre su Alcalde se pase en giras de promoción por todo el Estado, es inaudito que las autoridades Estatales en ves de poner un freno arenguen y sean cómplices de una campaña anticipada permitiendo ademas la realización de obras inútiles como lo es el teleférico que costara millones del erario o bien sean cómplices en la contratación de servicios de alumbrado publico con un excesivo sobre precio.

Las imágenes hablan por si mismas, esta es la realidad de una ciudad con múltiples deficiencias y ello se pretende esconder a la luz publica por los caprichos de un Gobernador obstinado en imponer sucesor.