Más de una década tuvo que pasar para que los modelos más famosos de la pantalla grande, Derek Zoolander y Hansel Mcdonald regresaran con la sátira acerca de la moda y todo lo que este mundo conlleva. En este nuevo filme las cosas dan un giro radical, ya que el mundo de la alta costura ha cambiado junto a toda esta era tecnológica y este par de modelos masculinos tendrán que adaptarse.
“Esto es sobre vanidad y ego”, dijo Ben Stiller sobre la idea original de la película. “Y creo que algo ha pasado en ese sentido desde que nuestros teléfonos se convirtieron en cámaras que conectan con la idea de estar obsesionados con nosotros mismos”.
Pero el hecho de hacer una comedia sobre la excéntrica vida de las y los modelos no resulta ser tan fácil. “La moda es un mundo tan excesivo que casi resulta difícil exagerarlo. Ese casi es el mayor reto a la hora de hacer esta película; a veces era difícil encontrar el humor propio más allá de la realidad, por eso acabamos jugando mucho con el tono”, mencionó el actor.
En esta nueva entrega Derek y Hansel, junto con Valentina (Penélope Cruz), intentarán resolver qué hay detrás de las muertes de las personas más hermosas, no sólo del mundo de la moda, sino también de la farándula. Por supuesto el arma más letal que los ayudará será la mirada Magnum.
En esta ocasión muchas celebridades y personajes importantes del mundo de la moda se contactaron de inmediato con Ben para aparecer en esta segunda parte, no como en el primer filme, donde muchos de las celebridades que habían aceptado hacer algún cameo decidieron abandonar la producción por el hecho de cómo se burlaba la película de su profesión.
pareja explosiva
Cuando Ben se comunicó con Penélope, ésta no dudó ni un segundo y mientras estaba comprando pañales aceptó formar parte del elenco de la cinta, y es que Cruz insiste que para una fan como ella era un sueño “estar junto a Derek y Hansel”. “Los fans de Zoolander están por todas partes y la gente tiene ganas de reírse”, subraya la actriz, que recuerda que durante el rodaje con Stiller y Wilson su gran preocupación fue no arruinar la mitad de las tomas por la risa.
“Es que son tremendos. Separados también, pero cuando se juntan son imparables y en la película yo soy la seria del grupo”, dijo la española.
