«Más allá de lo que Rotary signifique para nosotros, el mundo lo conocerá por la obra que realice». Paul Harris.
Durante el mes de julio de 1912, Paul Harris escribía en The National Rotarian: “…la única lección de la vida, es separarnos de nuestro propio “yo”. Apenas siete años antes, un 23 de febrero de 1905, había fundado una de las primeras organizaciones de servicio en el mundo: El Club Rotario de Chicago. La lógica de Harris es simple y profunda, el mejor ejemplo de la renuncia al «yo», lo encontramos en el acto de amor de un buen padre o una buena madre hacia los hijos, al preferir darles de comer, vestirles y procurarles primero que a ellos mismos, es decir, «Dar de sí, antes de pensar en sí». Esta frase se consolidaría con los años como el lema Rotario. Y lo cierto es que si cada persona en el mundo, actuara de vez en vez para con sus semejantes pensando en el bien social más que en el personal, la humanidad sería muy distinta.
A nivel mundial en ciento diez años de existencia, Rotary ha logrado que el sólido compañerismo de sus miembros, se transforme en significativos proyectos de servicio a la comunidad. Ante las dificultades, problemas y carencias, hoy más de 1 millón 300 mil socios, agrupados en más de 34 mil clubes repartidos entre 200 países, buscan encontrar soluciones, llevando al siguiente nivel la responsabilidad de servicio que como ciudadano debe tenerse para con los demás. Por ejemplo, el proyecto más importante globalmente conocido es Polio-Plus, propuesto por Carlos Canseco, un mexicano que en su momento presidió Rotary International. El resultado fue que para el año 2012, apenas se registraron 300 casos de Polio en el mundo, contra los 385,000 casos que se presentaban en 1985.
Celebro pertenecer con orgullo al Club Rotario de Saltillo y la reciente iniciativa aprobada por el Congreso del Estado, para celebrar el 23 de febrero como día estatal del Rotarismo en Coahuila, sé que significa que muchos ciudadanos más podrán interesarse por la labor Rotaria y seguramente decidirán unir sus manos a esta gran familia, para continuar dando de sí, antes de pensar en sí.
«Compartir las penas es dividir el sufrimiento, pero compartir la felicidad es duplicarla.»
Somos lo que hemos leído y esta es, palabra de lector. [email protected]
Escrito por: Alberto Boardman
