La Brigada Independiente de Búsqueda del colectivo “Hasta Encontrarte” informó sobre la localización de 21 cuerpos enterrados en una fosa clandestina de Abasolo, Guanajuato, la mayor en lo que va de 2024 y aún faltan zonas por explorar, advierten las activistas y familiares de personas desaparecidas.

Los trabajos en el predio ubicado en la colonia Los Álamos, entre las comunidades de San Isidro y El Saucillo, al sur de Irapuato, arrancaron el pasado miércoles, cuando las madres buscadoras recibieron una llamada anónima y acudieron a la zona en compañía de la Fiscalía General del Estado (FGE) de Héctor Alonso Díaz Esquerra, titular de la Comisión Estatal de Búsqueda.

Primero fue un cuerpo, pero la llamada que recibieron les advirtió que en la zona se encontraban “varios”, así que siguieron excavando y para el fin de semana ya eran 18 los cuerpos recuperados, algunos con varios años enterrados en la fosa clandestina.

Fue durante este miércoles que el colectivo actualizó la cifra a 21, convirtiéndose no sólo en el mayor hallazgo de cuerpos enterrados ilegalmente en la comunidad, también en la fosa clandestina más grande de lo que va de 2024.

Karla Martínez, líder de la Brigada de Búsqueda Independiente, indicó a El Sol de México que el lugar está resguardado por personal de la FGE, por lo que no pudieron realizar un levantamiento fotográfico, no obstante, pidieron a las personas que tienen a familiares desaparecidos acudir a las autoridades para consultar la carpeta de investigación 52904/2024 y consultar posibles coincidencias, ropa o artículos que pudieran ser o ayudar a la identificación de sus seres queridos.

De acuerdo con el medio Zona Franca, podría haber más de 70 cuerpos, algunos de ellos con dos o más años de haber sido enterrados en la fosa clandestina; sin embargo, esta información no ha sido confirmada por las autoridades o por los colectivos de madres buscadoras que se encuentran vigilando las labores de búsqueda y recuperación de restos

Reportes de medios locales dan cuenta de al menos dos fosas clandestinas descubiertas en el municipio de Abasolo durante los últimos años.

El periódico AM dio reportó estos hallazgos, el primero ocurrido en 2018 cuando dos personas percibieron un fuerte olor a podrido que escapaba de las inmediaciones de la matriz de Gas Transnoel, después de llamar al 911 se comprobó que el olor era producido por restos humanos en descomposición; el segundo hallazgo se presentó en marzo del año pasado en un predio que era utilizado como granja y en cuyo interior fueron descubiertos varios cuerpos semienterrados. En ambos casos las autoridades no divulgaron la cantidad exacta de las víctimas.

Respecto al estado completo, fue durante la primera quincena de enero cuando integrantes del colectivo “Hasta Encontrarte” hallaron la primera fosa clandestina del año en Guanajuato; se trató de cinco cuerpos recuperados de un predio de la comunicad de San Nicolás Temascatio, en Irapuato.

Según cifras obtenidas del informe “Buscar entre el dolor y la esperanza: hallazgos de fosas clandestinas en México 0220-2022″, el estado de Guanajuato es el que concentra la mayoría de hallazgos de entierros ilegales, con 187; además de ser la segunda entidad en recuperación de cuerpos a nivel nacional, con 294 cuerpos, sólo detrás de las 423 víctimas de Jalisco.

El informe refiere que parte de este incremento se debe a la creación de una Comisión de Búsqueda que presione a las autoridades y acompañe a los colectivos de madres buscadoras; empero, no dejan de lado la violencia que desde años atrás impera en Guanajuato debido al enfrentamiento entre grupos del crimen organizado que se disputan el control de delitos como la extorsión, el secuestro y el robo de combustible.