Rubén, el PRI y la cama ranchera.
Alejandro Moreno (Alito) no debería andar tan tranquilo, si bien la borregada del PRI ósea sus delegados votaron para cambiar los estatutos y permitir múltiples reelecciones nadie le asegura que no reciba una puñalada por la espalda, la pareja conformada por Ruben y Carolina es muy ambiciosa.
Seria bueno que Alito realice un conteo interno de incondicionales para saber a ciencia cierta con que cuenta, en poco tiempo deberán tener elecciones internas para definir quien quedara al frente del moribundo PRI, una cosa es que pueda buscar ser reelecto pero otra distinta que gane dado el caso de tener competencia.
El golpeteo feroz que recibe Alejandro Moreno en medios nacionales podría ser no solo generado por sus pifias, nadie puede asegurar que no sea un encargo, sabemos que en el tema de atacar con plumas se pintan solos y nunca le tiembla la mano cuando se trata de hacer su casa encender con tal de ver la del vecino arder.
Cundo el rio suena es por que agua lleva, Miguel Riquelme podría ser la herramienta para despachar a Alito, en los pasillo se rumora que Manlio serviría de cuña para ese apalancamiento.
La moneda en el aire, igual no todo podría ser tan bueno como le parece al aun dirigente nacional del PRI.
Marko Cortés también quiere quedarse.
Otro a quien le quedo sabrosa la mano entregándose a Morena es a Markitos, comparte en sus anhelos seguir dirigiendo al PAN pues sabe lo mucho que se gana perdiendo.
Cuando uno analiza a las cabezas del partido Acción nacional no resulta difícil dar cuenta de que son los mismos de hace décadas, gente que sabe hacer fortuna viviendo del dinero publico, un pequeño club privado en donde siempre son los mismos socios privilegiados.
El futuro de Acción nacional luce lúgubre, incluso peor que el de su socio tricolor, ellos ni siquiera tienen gente, son muy pocos los que tienen membresía, antes cuando se vendían como la oposición no ocupaban engrosar sus filas y ahora aun que lo quisieran no van a poder.
Lo negativo de que lleguen inversiones extranjeras.
Mucho se presume la llegada de empresas o inversiones extranjeras pero con su ingreso no todo es beneficio, si uno se pone a pensar lo cambiado que se encuentra Saltillo podremos dar cuenta de que no todo es para bien.
Con la llegada de nuevos empleos también llegan empleados, la gente que entra a trabajar no necesariamente es originaria de Saltillo y el dinero que se genera no todo queda en la ciudad.
Hoy padecemos un trafico vehicular fastidioso, tardamos el doble o triple de tiempo para trasladarnos de un lugar a otro, se gasta mayor dinero en combustible, se termina la tranquilidad, los costos de las rentas al igual que de bienes inmuebles sube, se fulmina al comercio local, la seguridad requiere mayor trabajo, el gasto en personal municipal aumenta y se deja de destinar el dinero para obras publicas, la sociedad se torna mas fría, se van perdiendo costumbres, tradiciones, formas, educación y ese calor humano que en antaño existía.
En gustos se rompen géneros pero en lo personal disfrutaba mas el Saltillo de hace treinta o cuarenta años que el actual, puede ser que hubiera menos dinero pero antes no se requería tanto para subsistir, a mi ver muy personal la gente era mas feliz.
A mí mis timbres, a Dios rogando y con el mazo dando