Según el reporte oficial de la Sedena, los soldados dispararon contra un camión de redilas sin saber que en el vehículo viajaban más de 30 migrantes.
Al menos seis migrantes fallecieron y 10 más resultaron heridos la noche del martes, luego de una persecución y presunto enfrentamiento entre miembros del Ejército Mexicano y traficantes de personas, en un camino de terracería entre Villa Comaltitlán y Huixtla, en la región del Soconusco de Chiapas.
Los hechos ocurrieron alrededor de las 20:30 horas en un camino rural que comunica a los ejidos Emiliano Zapata y Lázaro Cárdenas, esto en el municipio de Villa Comaltitlán, una ruta alterna llamada la ruta de Los Cocos, para evadir de forma ilegal el control migratorio federal que se ubica sobre la carretera Panamericana.
Una patrulla de la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) que vigilaba la zona para detectar traficantes de personas o de drogas, vio un camión de carga al que pretendió darle alcance, pero en la huida los traficantes presuntamente atacaron a tiros a los uniformados por lo que estos respondieron al fuego, según una versión de los hechos.
El conductor del camión de carga de rediles perdió el control de esa unidad, se salió del camino rural y se estrelló contra unos árboles.
Al acercarse con cautela los uniformados hallaron a personas que lloraban y gritaban pidiendo auxilio, se percataron que la mayoría de los ocupantes eran migrantes escondidos en la plataforma del camión y otros más en el suelo. De los traficantes nada se supo, ya que al parecer huyeron entre la maleza y la oscuridad de la noche.
Al lugar acudieron de inmediato elementos de la Policía Estatal Preventiva (PEP), quienes, al llegar, se encontraron con la Policía Municipal a bordo de las unidades 22-500 y 22-400. Al sitio también llegaron ambulancias de Protección Civil, a bordo de las unidades 083 y 086, quienes empezaron a trasladar a los primeros heridos al Hospital General de Huixtla. Otros más fueron llevados al Hospital General de Tapachula.
¿Qué se sabe de los 6 migrantes asesinados en Chiapas?
Una primera versión señala que en el lugar quedaron cuatro personas sin vida, todas migrantes, y que dos muy graves fallecieron en el nosocomio de Huixtla.
De los cuatro fallecidos se dijo que uno de ellos era un hombre de entre 20 y 25 años, con camiseta negra, pantalón de mezclilla azul y tenis negros con blanco.
La otra persona del sexo masculino tenía entre 45 y 50 años, y vestía camiseta gris, pantalón de mezclilla azul y tenis negros.
Un tercer fallecido tenía entre 20 y 25 años, vestía camiseta negra y pants gris y la última víctima, entre 25 y 30 años, vestía camiseta rosa, pants gris y tenis blancos.
En su reporte policiaco, los informados estatales señalaron que al llegar encontraron en la escena a dos vehículos involucrados en los hechos: un Chevrolet tipo Cheyenne, de color verde, con número económico 0861364 perteneciente al Ejército Mexicano, y una camioneta Ford tipo Redila, color verde, con placas de circulación LD-16-358 del Estado de México.
Además, se encontraron más de 10 casquillos de bala con la inscripción “1.62 FMB 12″ en la base.
Entre las víctimas trasladadas al Hospital General de Huixtla y que perdieron la vida, se identificaron a dos personas: Eriny Saad S., de 11 años, quien vestía una sudadera gris y pantalón de mezclilla negro; y Elvia Saad S., de 18 años.
Los cuerpos de los fallecidos fueron levantados tras concluir las diligencias en la escena del crimen y trasladados al Servicio Médico Forense (SEMEFO) de la ciudad de Tapachula, donde se les realizará la necropsia de ley correspondiente.
Sedena separa de sus funciones a soldados involucrados
Sobre los hechos se dio a conocer que los presuntos traficantes de personas dispararon contra elementos del Ejército Mexicano y ellos repelieron la agresión, sin saber que en el vehículo viajaban alrededor de 30 migrantes.
El cuerpo de las víctimas fueron levantadas alrededor de las tres de la mañana de este miércoles, mismos que se encuentran en calidad de desconocidos en el servicio médico forense junto a las dos personas que fueron levantadas en el Hospital General de Huixtla.
SEDENA se pronunció esta tarde ante el hecho ocurrido en Chiapas:
La Secretaría de la Defensa Nacional hace del conocimiento de la ciudadanía que el 1 de octubre del presente año, sobre el tramo carretero Villa Comaltitlán-Huixtla, aproximadamente a las 20:50 horas del martes primero de octubre de 2024, integrantes del Ejército Mexicano al efectuar reconocimientos terrestres, detectaron un vehículo tipo pick up que iba a alta velocidad, mismo que al ver al personal militar se evadió. A la retaguardia de la pick up se desplazaban dos camionetas de redilas como las que usan grupos delincuenciales en esa región.
Personal militar manifestó escuchar detonaciones, por lo que 2 elementos accionaron su armamento, deteniendo su marcha una de las camionetas de redilas.
Posteriormente, el personal militar al acercarse identificó a 33 migrantes de nacionalidad egipcia, nepalí, cubana, hindú, pakistaní y árabe, de los cuales 4 habían fallecido, 12 lesionados y 17 ilesos. A los heridos, el personal militar les proporcionó los primeros auxilios, trasladándose inmediatamente en vehículo al Hospital General de Huixtla, Chis., donde desafortunadamente 2 más perdieron la vida. Los 17 migrantes que resultaron ilesos fueron puestos a disposición del Instituto Nacional de Migración.
Los 2 militares que dispararon fueron separados de sus funciones y al ser un hecho donde se vieron afectados civiles, se hizo del conocimiento de la Fiscalía General de la República para que realice las diligencias legales correspondientes y determine deslinde las responsabilidades que correspondan; sin perjuicio de que la Fiscalía General de Justicia Militar realice las investigaciones respecto a la disciplina militar.
Se estableció coordinación con la Secretaría de Relaciones Exteriores para que se mantenga en contacto con las embajadas correspondientes.
La Secretaría de la Defensa Nacional, en el ámbito de su competencia, refrenda su compromiso de actuar con estricto apego al estado de derecho, bajo una política de cero impunidad y está atenta a requerimientos por parte de las autoridades civiles para el esclarecimiento de los hechos.
Información de: El Financiero
