El PAN se encuentra a nada de quedar invisible en Coahuila, después de haber logrado casi ganar la Gobernatura en las presentes elecciones no existirá un solo municipio gobernado bajo sus siglas.
Hoy podría afirmarse que la culpa es de las negociaciones que a nivel nacional Marko Cortés realizo con Alito Moreno y Rubén Moreira, pactos que solo sirven a los altos dirigentes pero que tiran por la borda el trabajo de años en Coahuila.
La realidad es que los dueños del PAN a nivel Estatal igual son cómplices pues se entregaron de una forma obscena al PRI dejando tirados a quienes por décadas les apoyaron, en su ambición por lograr puestos, contratos, notarias y otro tipo de canónigas apostaron al mal menor y ello fue justamente el dejar a su suerte al Alcalde de Monclova.
Mientras los eternos dueños del PAN tengan parte del pastel todo lo de mas es perdida razonable.
Así las cosas Mario Dávila Delgado pagara consecuencias de las practicas que en por años realizo, venderse al PRI y ser un lacayo disfrazado de oposición, hoy le toco perder, llego de la mano del PRI a la Alcaldía y por la mano del mismo PRI es que fracasara en su intento de reelección.
Su propia gente ya dio cuenta de la realidad y sabe bien que la única tabla de salvación que les queda es darle la espalda al actual Alcalde, no existe consecuencia ni desfiguro en ello pues si a nivel nacional el PAN se convirtió en alfil del PRI que de malo tendría que a nivel local actúen igual.
La Derrota del PAN en Monclova es evidente, no realizaron un buen desempeño, tienen administraciones engañando a la ciudadania, sus antecedentes en cuanto a administración de los recursos es dudosa, no tienen estructura, su militancia fue traicionada, no tren recursos suficiente, a nivel nacional van en Alianza y por si fuera poco el 70% de los pocos panistas que aun quedaban ahora vitorean a otros partidos.