La violencia continúa en Sinaloa generando una situación ya insostenible, en Culiacán a plena luz de día en una calle altamente transitada un Jefe policíaco fue acribillado junto a su escolta que por desgracia perdió la vida. 

El auto en que viajaban presenta múltiples impactos de bala tanto en su parabrisas como en los costados, ambos tripulantes fueron trasladados al hospital por propios compañeros que arribaron a la escena del atentado. 

Queda claro que el Gobierno de dicha entidad al igual que las fuerzas federales y militares están rebasadas, Sinaloa es un Estado sin ley bajo el yugo de la delincuencia organizada. 

En tanto que miles de familias se encuentran desesperadas integrantes de Morena a nivel federal siguen aferrados a mantener en su cargo e impune al gobernador Rocha Moya, una actitud de complicidad oficial que difícil mente se podría creer suceda en la vida real. 

La ciudadania teme salir a las calles, el ausentismo en las escuelas se acentúa, comercios continuan cerrando mientras que el miedo aumenta.