Una Afore es, de acuerdo con su acrónimo, una Administradora de Fondos para el Retiro, es decir, una institución financiera que además de administrar, invierte y resguarda las aportaciones de los trabajadores en sus cuentas para el retiro, de acuerdo con la Comisión Nacional de Sistema de Ahorro para el Reito (Consar), que regula estas entidades.
El pasado 21 de abril fue publicado en la Gaceta Parlamentaria que el diputado federal del partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena), Edelmiro Santiago Santos Díaz, emitió una iniciativa para reformar la Ley de los Sistemas de Ahorro para el retiro en la que propone al Banco del Bienestar, antes Banco del Ahorro Nacional y Servicios Financieros (Bansefi), para que administre las Afores.
Aunque una de las funciones de este banco fue, de acuerdo con Milenio, facilitar el ahorro y el acceso al financiamiento, esta institución esta enfocada la distribución de los programas sociales del gobierno de Andrés Manuel López Obrador (AMLO).
La propuesta del morenista consiste en que sea el Banco del Bienestar, Sociedad Nacional de Crédito, Institución de Banca de Desarrollo quien se dedique “de manera habitual y profesional a administrar las cuentas individuales y canalizar los recursos de las subcuentas.”. Lo que quitaría dichas atribuciones a las entidades financieras (Afores) que actualmente la realizan.
Los argumentos de la propuesta están basados principalmente en que, de acuerdo con la Consar, a partir del 2022, la primera generación de personas inscritas en las Afores se retirarían con una pensión de 4 mil 475 pesos.
Aseguró que especialistas estiman que “en tres o cuatro años, cuando las generaciones inscritas en las AFORES se den cuenta de que las pensiones son tan bajas que incluso el gobierno tendrá que otorgar recursos” para proporcionar el monto mínimo de pensiones de acuerdo con la Ley del Seguro Social.
El diputado estima que esta situación podría generar exorbitantes costos al erario público y volverá “obsoletos” los sistemas de ahorro por medio de Afores.
De acuerdo con Santos Díaz, esta acción tiene por objetivo establecer un sistema en el que :
Cobre menos comisiones por el manejo de las cuentas individuales, utilizando una institución financiera existente a cargo del estado, lo cual disminuirá el impacto presupuestal y permitirá operar el sistema de forma inmediata
Es decir, el control de los fondos de ahorro para el retiro pasaría a ser una responsabilidad del Estado. Además, la propuesta también busca eliminar las 10 Afores que existen en el país para que los recursos sean administrados por el gobierno.
Muchos mexicanos comenzaron a oponerse a la propuesta en redes sociales argumentando que se trata de un “intento de robo” o de un acto de corrupción . De acuerdo con el Barómetro Global de la Corrupción: América Latina y el Caribe, realizado por la organización Transparencia Internacional, el 90% de los mexicanos piensan que la corrupción en el gobierno es un problema grave y un 36% piensa que la administración mexicana no hace lo suficiente para atender el problema.
Para finales de 2019, el 44% de los encuestados consideró que la corrupción había aumentado, aunque es una percepción menor que en 2017 cuando era del 61%, muchos mexicanos siguen percibiendo fuertemente los efectos de esta práctica, que el actual presidente de México asegura constantemente estar combatiendo.
Las atribuciones del Banco Bienestar:
En caso de aprobarse, la administradora realizaría las actividades que actualmente son responsabilidad de las Afores: podría percibir ingresos por la administración de los recursos de los fondos de previsión social y contar con “un capital fijo sin derecho a retiro totalmente pagado”.
El Banco del Bienestar tendría que apegarse, entre otras, a la siguiente normativa:
1. Estará obligada a mantener una reserva especial invertida en las acciones de cada una de las sociedades de inversión que administren.
2. Cobrará a los trabajadores con cuenta individual las comisiones con cargo a esas cuentas, aunque especifica que éstas deberán ser las más bajas.
3. Cobrará comisiones distintas por cada una de las sociedades de inversión que operen.
4. Cobrará comisiones sobre bases uniformes sin discriminación alguna al trabajador
5. Presentará la Junta de Gobierno de la Comisión sus comisiones para autorización cada año dentro de los primeros diez días hábiles del mes de noviembre, para ser aplicadas en el año calendario siguiente.
6. Mantendrá a los trabajadores al tanto de las comisiones que se le cobran
7. Tendrá consejeros independientes, expertos en materia financiera, económica y jurídica sin vínculo a la administradora.
8. Entregará a la Consar toda información que se le solicite
9. Prestará a la sociedades de inversión los servicios de distribución y recompra de sus acciones
10. Podrá invertir (con aprobación de la Consar) en empresas que presten servicios auxiliares o complementarios
Aunque el Banco del Bienestar estaría sujeto a los mismo derechos y obligaciones que tienen actualmente las Afore como mantener las comisiones al mínimo requerido, notificar a los trabajadores de sus comisiones y los cambios en las mismas y que la mayoría de sus acciones estén aprobadas por la Consar, a muchos mexicanos les preocupó que los fondos para el retiro puedan ser administrados de manera estatal, sobre todo, considerando los altos niveles de corrupción del país.
