Descentralización Por Enrique Martínez y Morales

27 agosto 2018
Visto: 747 veces

LHiAToD6_400x400

Interesante resulta la propuesta de descentralizar la administración pública federal. He leído y escuchado opiniones de todo tipo. Las voces a favor, porque se descongestionaría la capital y la derrama económica se trasladaría a otros puntos clave del territorio nacional; las que están en contra, aducen dificultades logísticas y pérdidas en eficiencia y practicidad de llevarse a cabo.

Se utiliza con insistencia al INEGI como referencia. A veces como ejemplo de caso de éxito de la descentralización; otras, como muestra de las complicaciones y dificultades que  conlleva. El INEGI inició su éxodo hacia Aguascalientes en 1985 por el deterioro que provocó el temblor a sus instalaciones y en la moral de los trabajadores.

Claro que se debe analizar el caso del INEGI. Desde las condiciones ofrecidas a los empleados, como créditos para la adquisición de vivienda y la construcción de escuelas para sus hijos, hasta los retos en infraestructura vial y urbana que enfrentó la ciudad. Pero este caso no es único. Existen muchos otros que deben tomarse en cuenta.

Por la misma causa, Caminos y Puentes Federales (Capufe), después de una larga transición, mudó sus oficinas a Cuernavaca. Las condiciones ofrecidas a los trabajadores fueron similares a las recibidas por los empleados del INEGI, aunque también se incluyó un programa de contratación de cónyuges.

A su vez, luego de operar inicialmente en la Ciudad de México, la Comisión Nacional de las Zonas Áridas (Conaza) es trasladada a Saltillo, puerta de entrada al Desierto Chihuahuense. Por motivos similares, la Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca (Conapesca) está en Mazatlán desde su creación en 2001.

Aunque sus orígenes se remontan a 1954, FIRA deja 40 años después una pequeña guardia en la CDMX y traslada su corporativo a Morelia, como parte del programa de descentralización impulsado desde entonces. De la misma forma, el decreto de creación de Agroasemex cita como sede original la CDMX, y posteriormente cambia sus oficinas centrales a Querétaro.

Aunque Hidalgo no es el principal estado minero del país, dicha actividad es parte importante de su economía, razón por la cual seguramente está asentado en Pachuca el Servicio Geológico Mexicano (SGM). No es el caso de la Comisión Nacional Forestal (Conafor) localizada en Guadalajara, pues Jalisco no destaca en ese rubro. Quizá la procedencia de su primer director, en 2001, influyó para su ubicación.

Aunque parciales, existen esfuerzos y ejemplos de descentralización administrativa cuyos costos y beneficios deben ser ponderados para tomar las mejores decisiones. Y debe resolverse en un sentido u otro, pero siempre a partir de irrebatibles razones estratégicas, económicas y logísticas.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *