Monterrey, NL. El Congreso de Nuevo León determinó en comisiones que la entidad eliminará la Tenencia sobre vehículos de manera gradual. En 2016 se pagará 40% menos; en 2017 será de 70% menos, y en 2018 se eliminará por completo.
El día de hoy el dictamen pasará al pleno y será enviado al Ejecutivo para que se publique en el Diario Oficial.
El diputado Arturo Salinas, líder de la bancada del PAN, afirmó que en una reunión de legisladores con el secretario de Gobierno, Manuel González Flores, se acordó eliminar gradualmente el gravamen.
Añadió que no se permitirá que los recursos se empleen en el pago de gasto corriente, ni tampoco para el pago de deuda, y pedirán a los contribuyentes que se pongan al corriente porque tienen un adeudo de 3,000 millones de pesos.
El tema constituyó el primer encontronazo entre el recién llegado gobierno independiente de Jaime Rodríguez Calderón, y un Legislativo dominado por el PRI y el PAN.
Legisladores priístas y panistas votaron en la comisión de Hacienda en favor de eliminar el impuesto; pese a que el gobernador Jaime Rodríguez pidió mantenerlo para evitar un hueco en las finanzas estatales.
En tanto, el secretario de Finanzas y Tesorería, Carlos Garza Ibarra, comentó al término de una reunión con integrantes de la Comisión de Hacienda que lo más probable es que arrancarían con números negativos la presente administración.
“Si como Estado me veo imposibilitado de poder cerrar financieramente el año, parte del déficit lo voy a tener mandar hacia el próximo ejercicio: arranco con menos. Si a eso le agrego que no voy a tener un ingreso (por la Tenencia que representa 2,300 millones de pesos), nos va a afectar”.
No hay margen
“No tenemos margen (de operación), incluso haciendo grandes esfuerzos de ahorro”, añadió.
Sin embargo, el coordinador de la fracción del PAN en el Congreso local, Arturo Salinas Garza, dijo que “el estado no tendrá ninguna afectación. Hemos corrido los números; en 2016 va a recibir sólo de aumento en participaciones más de 3,000 millones de pesos”, sostuvo en días previos.
Según el artículo 71 de la Constitución Política del Estado de Nuevo León, si acaso el gobernador no estuviera de acuerdo, puede devolver el dictamen con observaciones durante un periodo de 10 días.
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